Reflexiones.
Hace 3 meses, en mi editorial hablé sobre aspectos médicos de la
pandemia provocada por el virus Sarscovid-19 (Un
ser vivo infinitamente pequeño causa grandes daños.), hoy, 3 meses
después, sabemos lo devastadora que ha sido la pandemia, los millones de
personas que se han infectado y continúan infectándose, así como las centenas
de miles que han muerto.
Hoy quiero Acer unas reflexiones relacionadas con la pandemia: sabemos
que el ser humano es el animal más depredador del ecosistema en que vive; que
está muy orgulloso de la evolución que ha tenido a lo largo de varios siglos y
del impresionante desarrollo tecnológico que ha implementado para “dominar la
naturaleza”; pero egoísta y negligente, ha ignorado que esa forma de proceder
se ha vuelto en su contra, ha provocado un calentamiento del planeta en que
vive, causando la extinción de muchas especies y otras están en peligro de
desaparecer; los coronavirus han existido en el planeta desde hace miles de
años de acuerdo con lo afirmado por la paleontovirología, en diversas especies
salvajes que han desarrollado anticuerpos contra ellos. No así el ser humano,
al tener el hombre contacto con una especie de estos virus por primera vez, y
lo que es peor al ingerirlos, y siendo este tipo de coronavirus desconocido
para su sistema inmunológico, ha sido presa fácil y sucumbido a ellos.
Debido al confinamiento que el hombre ha necesitado tener para no
infectarse, la madre naturaleza lo ha agradecido, como muestra de ello muchas
playas han vuelto a tener aguas cristalinas, algunas con pececillos, se ha
vuelto a observar la fotoluminiscencia producida por algas que han vuelto a
aparecer, ha disminuido la contaminación del mar por gasolina o diesel, han
sido vistos delfines tornillo cerca de las playas, hemos vuelto a escuchar el
trinar de más aves, más mariposas monarcas han llegado a los bosques.
Surge la pregunta: ¿Es necesaria la muerte de tantos miles de personas
para preservar la naturaleza? En los últimos 6 meses la atención ha estado
puesta en la pandemia por coronavirus y nadie ha volteado a ver a nuestro
ecosistema, los científicos están muy ocupados en la atención de enfermos, en
las medidas para minimizar los efectos dañinos, en desarrollar una vacuna y un
antiviral eficaz, pero muy pocos en reflexionar sobre el medio ambiente, en
salvar nuestro ecosistema y entender que la pandemia que vivimos está
directamente relacionada con un
profundo desequilibrio medio ambiental.
Autor: Dr. Bulmaro Landa Quezada. Tlalnepantla de Baz, Estado de México,
México.