De
vagones y vagoneros.
El
metro de la Ciudad de México fue inaugurado en 1969 con la curiosidad de una
población ya molesta por los inconvenientes que se habían causado en la
circulación vehicular debido a las excavaciones y los trabajos de construcción,
muy pronto todo el malestar fue suplido por elogios, , admiración y gratitud al
ver considerablemente disminuído el tiempo de transportación y el hacerlo en un
transporte moderno , agradable y eficiente; el crecimiento desmesurado de la
ciudad y por lo tanto de sus habitantes hizo que la red del metro creciera,
multiplicándose el número de líneas y extendiendo las ya existentes, pero la
crisis económica detuvo por cuatro años el ritmo de crecimiento, y no fue sino
hasta hace dos años que se inició la construcción de la línea 12, que comenzó a
funcionar hace un año 4 meses, y para nuestra sorpresa hace un mes escuchamos
la noticia de que los rieles, los durmientes y las grapas que los sujetan se
encuentran en pésimas condiciones, rotos o desprendidos en las curvas, lo que
pone en peligro a los miles de usuarios que la usan, por lo que se ha tenido
que suspender el servicio, siendo el escándalo actual el dilucidar quién o
quienes son los responsables.
Al
iniciar en metro era un placer viajar, había música suave en sus estaciones, en
las que hay locales comerciales con venta de bebidas, comida rápida y regalos,
poco a poco se fue incrementando el número de locales y se diversificó el
mercado y la oferta de mercancías, pero la afluencia de tantos usuarios abrió una
oportunidad de negocio desleal al instalarse infinidad de puestos de comida y
todo tipo de mercancías en la calle a la salida de las estaciones y en los
paraderos de autobuses que conectan con el metro, convirtiéndose en áreas
inseguras y antihigiénicas; y dificultando enormemente el paso peatonal, el
problema no paró ahí, vendedores ambulantes comenzaron a vender en los vagones
del metro, plumas, material impreso, posteriormente golosinas y botanas,
pregonando su mercancía. http://revistaesperanza.com/10pesoslevale.htm
El deterioro de la economía y el crecimiento
del crimen organizado han favorecido la proliferación del comercio ambulante,
las mafias han diversificado su mercado y propiciado actividades ilícitas,
siendo una de ellas la reproducción ilegal de discos compactos. La población de
personas ciegas de las clases socio-económicas menos favorecidas, al no tener
una escolaridad avanzada, ni capacitación para desempeñar algún oficio o
actividad técnica, fue ideal para ser elegida para venderlos en los vagones del
metro, equipados con aparatos portátiles de sonido a volumen alto , que caminan
de vagón en vagón tocando ejemplos de la música que venden, por eso se les
llama vagoneros, por el creciente número de ellos y por la contaminación sónica
que causan, fueron expulsados del metro, privándolos así delingreso que
percibían.
Lo
anteriormente expuesto patentiza la deshonestidad de las autoridades encargadas
de un vital medio de transporte que sirve a millones de personas.
Dr.
Bulmaro Landa Quezada. Tlalnepantla, Estado de México, México.