Otro verano ha llegado, y con él una combinación de acontecimientos, climáticos, sociales, laborales y, por supuesto, la aparición de otro número de nuestra revista, que al igual que los jardines que albergan árboles maduros que nos brindan sombra con su follaje, una gran variedad de plantas que nos regalan el perfume y colorido de sus flores, los diferentes matices del verde, también encontramos pequeños retoños que asoman a la vida, esto mismo sucede en nuestra publicación, en donde podemos disfrutar inmensamente la madurez periodística de connotados escritores, que nos obsequian con sus mejores galas, escritores nuevos, jóvenes en el arte de escribir y comunicar, así como adolescentes que nos ofrecen sus primeras expresiones, con lo cuál queremos cultivar la pluralidad de ideas en un ambiente propicio y amable, gracias a todos por formar parte de éste modesto jardín de las letras que en éste verano florece para ti lector donde quiera que te encuentres.