Curso de literatura y discapacidad.
Te propongo un viaje literario
donde podrás conocer a autores que viven, o no, con discapacidad.
Un recorrido de 8 semanas, del que saldrás con
una perspectiva más amplia, más empática de ti mismo y del mundo que te rodea.
Así, leyendo y escribiendo, inspirado por
autores como Irene Villa, Gonzalo Moure, Laura Esquivel, Truman Capote y otros,
reconocerás, como en un espejo, tus miedos, alegrías, avances, pérdidas y
reencuentros cotidianos.
El recorrido comenzará el lunes 16 de enero,
vía e-mail y si querés ser uno de los viajeros, espero tu correo para
inscribirte o recibir más información.
Prof. Laura S. de Ferro.
Profesora especializada en ciegos y disminuidos visuales.
E-mail:
Laurayroberto2005@funescoop.com.ar
DESTINADO A:
personas mayores de 18 años, con o sin discapacidad, interesadas en conocer
literatura relacionada con el tema: estudiantes de periodismo, lengua y
literatura, personas amantes de la lectura y la escritura.
Este curso me deparó, como a
los distintos grupos que participaron, una enorme cantidad de aprendizajes, y
la prueba palpable de que la voluntad de ser y hacer está presente aún en
situaciones donde la mayoría de nosotros se declararía totalmente impotente.
Así como todas las grandes
crisis, la desatada por la pandemia, nos permitió disfrutar de la literatura, y
pasar el tiempo de un modo productivo, desplegando la imaginación y conociendo
ficciones y realidades que despiertan sensaciones de asombro, incredulidad, y
dotando de sentido cada instante en que podemos estar vivos.
Yo he sido testigo de
verdaderas experiencias de perseverancia, por las cuales
en solo unos meses, algunos logran mejorar extraordinariamente su nivel de
escritura, volcando sus vivencias de un modo claro, esforzándose cada semana
para hacerlo mejor, con más precisión en el uso de todos los recursos que
nuestro idioma nos proporciona.
Lo que intentan las personas
con discapacidad, a través de su escritura, en su día a día, en cada una de las
actividades que emprenden, es superarse a sí mismas. Porque no hay carreras
imposibles, no hay emprendimientos vanos, cuando lo que se busca es aprender,
crecer, mejorarse y disfrutar en cada tramo del camino.
Si abriésemos la mente, la
maravillosa complejidad de las experiencias humanas nos enriquecería, porque
siempre hay una esperanza, una posibilidad de rescatar la belleza del mundo, y
de hacer algo, alguna forma de arte, aunque se tengan discapacidades graves.
Cada persona con discapacidad
lleva en sí riquezas incalculables, que, si la sociedad pudiese reconocer,
escuchar, cambiarían muchas de las disputas, las mezquindades, los enormes
problemas con los que tropieza una y otra vez, sin advertir que hay un
potencial dormido, con infinidad de seres que desean hacer su aporte, y lo
hacen, aunque no trasciendan sus voces, sus escritos, sus vivencias.
Prof. Laura S. de Ferro.
Laurayroberto2005@funescoop.com.ar