BEATRIZ…
Ya no recuerdo cuándo, pero mi razón siempre te tuvo,
y tu presencia formó parte, de los largos
caminos.
En esos tiempos, pinceladas, risas y conocerte fue
oportuno,
la lejanía nunca impidió que tu recuerdo fuera
destino.
La belleza y el arte fueron tu pasión,
las montañas y tu tierra fue mayor placer.
Allá muy lejos, en México se albergó tu corazón,
pero tus amigos quedaron por aquí… donde quisiste
nacer.
El buen gusto, porte y elegancia,
marcaron tu juventud plena y eterna.
Tu nombre, tu obra y tu alma, dejaron presencia,
y, ahora evocarte, será como cruzar los mares con linterna.
Tantas distancias siempre recorrías,
en busca de una
infancia dormida.
Añorabas quizás, una vida que antes tenías,
en estas tierras para ti lejanas, siempre te esperó un
alma amiga.
Ahora, el aire se adueñó de tu esencia,
y los vientos cantarán tus historias.
Todos los espíritus afines con paciencia,
buscaremos encontrarnos juntos con euforia.
Grandes y soleados terruños aztecas,
vieron crecer tu arte soñador.
Tus escritos reposan ahora en bibliotecas,
mientras gozas, en presencia del Hacedor.
Al espíritu, de una amiga cuya luminosidad, forma parte
de los espacios, y espera, con su eterno cariño, nuestra reunión… las de las almas que siempre vibraron en el existir.
Homenaje a Beatriz Buberoff, artista plástica
argentina, que formó su familia y tuvo dos hijas en México. Su vida transcurrió
en el DF y fue profesora titular en
Pintora y escritora, escribió varios cuentos
infantiles ilustrados.
Los amigos que quedamos en Argentina, la recordaremos
con cariño por siempre.
Diciembre 2011.
Autora: Renée Adriana Escape. Mendoza, Argentina.