Rosalva compartiendo una alegría más en su vida.

 

 

Una vez más, en este espacio, ahora les contaré sobre dos experiencias, actividades que realicé en el mes de noviembre que me llenaron de satisfacción y orgullo, ya que me arriesgué a explorar actividades que me han gustado y que si no las había explotado, ni desarrollado, fue por no darles importancia o poco interés en incursionar como sentirme trabajando en ellas.

Bueno, comenzaré diciéndoles, que durante el mes de agosto , volví a tomar la quinta capacitación sobre salud sexual de las personas con discapacidad visual, y e de comentarles que después de cada capacitación tenemos que realizar talleres, cursos en diferentes asociaciones, o espacios donde asistan personas con discapacidad visual , para explorar lo aprehendido; lo cual me ha permitido infinidad de experiencias, conceptos , conocimientos, interactuar más abiertamente y sobre todo más sinceramente con los chicos y chicas que he trabajado , dejándome en cada uno de estos trabajos muchas vivencias , que van nutriendo la mía propia. En esta no fue la excepción, solo que tuvo una variante muy importante porque expusimos el conocimiento, la problemática del tema y la posible solución, a través de las artes, como: el teatro, sensorama (técnica teatral, o en otros ámbitos, de sensibilización a través de los sentidos), la comedia, narración, la lectura, la poesía, el canto, la música, la descripción, etc.

Por cada uno de los compañeros integrantes de la capacitación, que ello me llevó a incursionar en estas disciplinas y, ya entrando en materia les digo, que yo y el chico Juan Manuel Islas Montes, dedicado a la música profesionalmente, pues trabaja como músico en un grupo y además ejerce la docencia enseñándola a los chicos que desean aprender algún instrumento o canto.

Siguiendo con mi narración, comento que el y yo, trabajamos con la poesía, el canto y la música, el tema del erotismo, a través de canciones y poemas donde declamé, canté y me sentí plena, realizada y muy contenta de haberme animado a explorar estos caminos para mi no desconocidos, pero si, no trabajados directamente y menos profesionalmente como ahora; fue una experiencia grandiosa vivirlo así.

En esos momentos de los ensayos, búsqueda de los materiales, canciones, poemas; les comparto que a mí me gusta mucho escribir, espero que lo noten ustedes, pues la primera poesía del trabajo expuesto en el proyecto es de mi autoría, que en otro momento les compartiré.

 Volviendo a mi narración, me llegó la convocatoria , de la Secretaría de Género de ULAC, para escribir un acróstico, poema o reflexión , para el día internacional de la no más violencia en contra de las mujeres, y ya animada y motivada por lo que andaba haciendo, escribí dos poemas y un acróstico que me costó , a decir verdad algo de trabajo hacerlo, pero salió y los mandé, pasando este hecho como a segundo término , pues mi realidad estaba en el compromiso adquirido con el evento de los derechos sexuales de las personas con discapacidad visual, el cual presentamos el día 10 de noviembre en las instalaciones de los Derechos Humanos de Ciudad de México, lo cual les presumo, fue todo un acontecimiento , pues la mayoría de nuestro público era con visión normal y todos los expositores somos ciegos, ya que el proyecto estuvo dirigido a trabajadores del sector salud, como médicos, enfermeras, trabajadoras sociales, orientadoras, maestros y público en general; repito que fue una satisfacción, un gusto lo realizado con este proyecto. El mismo no se presentó y se cerró, sino que en estos momentos está solicitado en dos teatros, escuelas y para actividad de una delegación de ciudad de México, para exponerlo en un parque en algún domingo en inicio de año; bueno, esto último son promesas, expectativas que tal vez no se lleven a cabo, pero de momento me son muy interesantes, y espero volver a retomar el tema para contarles como va el proyecto caminando.

Bueno, ahora retomo la segunda alegría de este mes, pues el día 26 , me llega a mi correo personal, la noticia de que fui ganadora con mi acróstico , en esa modalidad, con mi diploma lo cual me hizo saltar de gusto, emoción, alegría y que provocó en mi felicidad, que me llevó a comentar, mandarles el correo y enterar a casi todos mis amigos, conocidos y a todas las personas a distancia como ustedes , que no nos conocemos pero que al leer y darme unos momentos de su valioso tiempo, vamos interesándonos, conociéndonos y haciendo una amistad a la distancia, sabiendo que en otro lugar del mundo existe una persona , que escribe, que leo y que voy conociendo y tejiendo una red de emociones, sentimientos , o pensamientos que pueden desarrollar una amistad a la distancia.

Ahora, les comparto los textos ganadores de tres mujeres ciegas que se atreven a escribir.

 

En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la Unión Latinoamericana de Ciegos organizó el concurso Denunciamos la violencia hacia la mujer a través de la escritura, con el objetivo de denunciar a través de la poesía, acrósticos o reflexiones cualquier forma de violencia hacia las mujeres.

El jurado estuvo integrado por: Ana Peláez, de ONCE (España); Matías Ferreira de ULAC (Argentina) y Leticia Vargas de ULAC (El Salvador).

Luego de una ardua selección, han sido seleccionados los trabajos de: Rosalva García Benhumea (México); Estefanía Cubillos Nova (Panamá) y Haydee Valencia (El Salvador).

Felicitamos a todas las compañeras que participaron y les agradecemos que nos hayan regalado el gusto de leer cada uno de sus trabajos.

 

Estefanía Cubillos Nova (Panamá)

 

Reflexión 

 

El Silencio Matriarcal

 

Muchas mujeres en el mundo, crecemos escuchando la frase del humorista norteamericano Groucho Marx que dice: “Detrás de un hombre hay una gran mujer”.

Afirmación que se repite una y mil veces, sin siquiera cuestionarnos ¿Por qué o para qué la mujer debe estar tras una figura masculina? Pregunta que quizá se resuelva intentando comprender cómo en nuestra sociedad la mayoría de mujeres somos permisivas con nuestro silencio, tolerando y aceptando que desde la infancia a las niñas y niños se les hable y trate de forma distinta.

Porque es más importante para algunas personas que desde la cuna, un bebé vista de color rosa o azul, como si un tono en el vestuario pudiese rotular o clasificar a quien nace con una etiqueta semejante a la que poseen los productos de supermercado.

Detalles tan sutiles como estos nos deben mostrar que si hoy las mujeres exigimos igualdad y respeto, entonces debemos alzar nuestra voz y no callar ante imposiciones o formas de actuar, que nos violentan y que nosotras no debemos propiciar; tal como lo afirma el investigador Michael Kaufmann quien fue cofundador de la iniciativa del Lazo Blanco en contra de la violencia hacia la mujer al recalcar: "los hombres ostentan privilegios y ventajas desde su nacimiento", pero, a su vez, esa misma sociedad también les plantea unas "expectativas de masculinidad que ninguno puede cumplir, ya que deben ser rudos, fuertes, valientes, no llorar, no sentir emociones etc."

Hecho que consecuentemente visibiliza a la mujer como alguien débil, hipersensible y que está para ser protegida; enfatizando en la falsa creencia que relega a la mujer como solo una figura maternal y delicada, por lo tanto es necesario que las mujeres nos empoderemos y contrarrestemos este tipo de opiniones sesgadas que no nos dejan avanzar al completo en aspectos legislativos, laborales, donde también se deja de lado y se suprime la participación de la mujer con discapacidad estigmatizándola y cosificándola en los mensajes emitidos por los medios de comunicación.

 

Rosalva García Benhumea (México)

 

Acróstico

 

No más violencia en contra de las mujeres

 

No sé y me cuesta entenderme,

O, es acaso que mi mente y mi corazón,

Muestran que no hay un entendimiento en ellos.

Amor, me dice uno, maltrato me dice el otro,

Sin embargo parece que no entiendo su mensaje.

Veo tus acciones y pienso, yo soy la culpable.

 Intento solucionarlo, pero vuelve a suceder.

Otra y otra vez me lamento y me vuelvo a preguntar.

Estoy confundida, porque creo que me amas.

No, sé entonces el porqué de tu agresión.

Cada vez que te enojas, siempre intentas lastimarme.

Anoche nada menos me volviste a herir

Eso no lo quiero más permitir, no es posible que el amor sea así.

Con todo mi cuerpo, mis pensamientos y mi amor solo.

Obtengo ahora mi cuerpo lastimado y aún más fracturado.

No, nada más físicamente, también destrozado en mi interior.

Tengo que tomar una decisión.

Rotunda, dolorosa pero necesaria.

Amor tú no me amas, tú no puedes quererme.

De esa manera, tú tienes que entender, que el amar al otro no es golpear.

Lamento que nuestra relación se dice así.

Amenazas, reproches, golpes y heridas en el corazón.

Solo queda retirarme tu presencia.

Me dice que siempre que estemos juntos.

Una y otra vez tu reacción será sí.

Jamás, dejarás esas acciones, en contra de mí.

Es visto, porque nunca te enseñaron amar.

Ruego a dios, que no lleguen más mujeres a tu vida.

Entonces, tal vez entiendas tu actitud. Solo quiero alejarme, porque yo si sé amar y respetar, mi vida y la de los demás.

 

Haydee Valencia (El Salvador)

 

Poema

 

Denuncio

 

Yo denuncio la sangre derramada de todas mis hermanas.

Que han sido, y siguen siendo asesinadas con el paso de los siglos.

Ellas tenían distintos colores de piel, pero la misma voz.

Fueron hermanas nacidas de muchas madres.

Fueron la vida, el grito, el sueño de las diosas hecho carne.

Yo denuncio.

Los golpes que oculta Elena.

Las contusiones en el rostro de Lucía.

Y sobre todo, las agresiones de las mujeres que no tienen nombre en sus lápidas.

Porque jamás han aparecido en las estadísticas.

Porque el sistema las olvidó.

Porque alguien ofreció dinero a los medios, y desaparecieron la noticia.

Denuncio.

El encarcelamiento de mis diecisiete hermanas acusadas de abortar.

Están allí por ser pobres.

Por carecer de dinero para un buen abogado.

 Porque la iglesia tiene la mano sobre la tapa, imponiendo un rotundo (no).

Porque en la salud y sus políticas, somos las últimas que tenemos derecho a un bienestar.

Y como ellas, están encarceladas muchas de mis hermanas en el Centro, y en el Sur.

Denuncio las injusticias de todas las que trabajan en las maquilas.

De las que cultivan la tierra y no son remuneradas.

De las empleadas domésticas sin prestaciones sociales.

Denuncio la sangre, los golpes, las palabras.

Las contusiones, las injusticias que apuñalan a mis hermanas.

Ellas tenían la misma voz.

Ellas fueron el sueño de las diosas hecho carne...

 

Autora: Profa. Lic. Lucía Rosalva García Benhumea. Cuautitlán Izcalli, Estado de México, México.

rosalva.benhumea@gmail.com

 

 

 

 

Regresar.