CIEGOS Y DÉBILES VISUALES TRABAJAN EN EL
PROYECTO ESPERANZA
Iniciamos un nuevo año con el entusiasmo
de todos los años que comienzan, llenos de buenos propósitos y con mucha
esperanza, que nos hace ser positivos y optimistas. Tiempo de recordar y de hacer
recuentos, en cuanto al proyecto Esperanza, es muy gratificante que la familia
cibernética que hemos creado ha crecido, que con asiduidad nuevos integrantes
se inscriben a nuestra lista de correos, que las relaciones entre nosotros son
cálidas y respetuosas, que el esfuerzo de aportar diariamente material de
lectura nos caracteriza y es un factor que inclina la balanza a nuestro favor.
Como si esto fuera poco, el los últimos meses, el talento de algunos
integrantes de nuestro colectivo se ha hecho presente también en la música,
siendo uno de nuestros proyectos para el año que comienza vencer problemas
técnicos y crear nuestra fonoteca; que nuestra revista se fortalece día con
día, que el equipo de colaboradores aporta contribuciones de magnífica calidad
con un entusiasmo y desinterés que no es frecuente observar en otras
organizaciones y que ha consolidado nuestra publicación.
Sabemos que vivimos en un mundo convulso
y adverso que si es hostil para todos, lo es más para nosotros llevándonos en
ocasiones a situaciones críticas como lo fue la muerte de nuestro compañero
Eber Pérez Álvarez, tan querido por algunos de nosotros, , sin embargo seguimos
trabajando silenciosamente , sin ninguna retribución económica, con mucho
entusiasmo y con un sentimiento solidario realmente digno de elogio, una
mención especial merece la ardua labor de coordinación que realiza Verónica
Aguilar Núñez recopilando colaboraciones, haciendo la corrección ortográfica y
los envíos a un número creciente de subscriptores, utilizando sus horas de
sueño para no descuidar su trabajo; es por eso que hoy quiero rendir un
homenaje a todos y cada uno de ustedes que bien sea como lectores o escritores
hacen que el proyecto Esperanza siga adelante.
A todos los integrantes de nuestra gran
familia cibernética quiero desearles que el año que hoy comienza sea pleno de
realizaciones, bienestar y trabajo que nos dignifica.
Bulmaro Landa Quezada.