DULCE CARIDAD
Ficha Técnica:
País y año: Estados Unidos, 1969
Dirección: Bob Fosse
Guión: Peter Stone & Neil Simon
sobre el guión "Le Notti di Cabiria" de Federico Fellini y Ennio
Flaiano
Actores:
Shirley McLane, John McMartin, Chita Rivera, Paula Kelly, Ricardo Montalban,
Samy Davies Jr.
Producción: Robert Arthur
Fotografía: Robert Surtees
Montaje: Stuart Gilmore
Diseño de vestuario: Edith Head
Música: Cy Coleman y Dorothy Fields
Coreografía: Bob Fosse
Sinopsis:
Las aventuras y desventuras de Charity
Hope Valentine, una bailarina de un salón de baile llamado "Fandango
Ballroom" en New York. Todo inicia en Central Park, donde Charity se
encuentra con su novio Charlie quien le roba su bolso, la tira al lago para
después salir corriendo y dejarla con el corazón destrozado.
Comentario:
“Sweet Charity” se estrenó en Broadway
en 1966 y es la versión teatral de la película Las Noches de Cabiria, una de
las más representativas del gran maestro italiano Federico Fellini.
Pero la historia de este gran musical
nació en 1965, cuando una de las más valoradas figuras de Broadway, Gwen
Verdon, buscaba una obra para regresar al escenario luego de un tiempo de
inactividad. Bob Fosse y el afamado productor Cy Feuer pensaban adaptar
Desayuno en Tiffanys, pero Truman Capote creía que la Verdon era demasiado
mayor para el papel. Hurgando guiones y desmenuzando ideas, apareció el filme
“Las Noches de Cabiria”, que Fellini filmó en 1957, que aborda el tema de la prostitución
femenina, una idea que a Fosse le apasionó de inmediato.
Naturalmente, el teatro de Broadway
siempre abierto a la experimentación y la creatividad no tenía problemas con el
tema del oficio más viejo del mundo.
Así fue como se logró reunir a uno de
los mejores grupos de trabajo de la historia de la comedia musical, ya que Neil
Simon recibió el improvisado libreto de Fosse y comenzó a darle forma. A su
vez, Dorothy Fields (autora de Annie es un Tiro) y Cy Coleman (Ciudad de
Angeles y Barnum) compusieron canciones innovadoras, con ritmos de innegable
marca sesentera, que varían entre las baladas y el jazz furioso. De esa manera,
Las Noches de Cabiria terminó por convertirse en “Dulce Caridad” (Sweet
Charity), que se estrenó en Broadway el 29 de enero de 1966, La producción fue
nominada para 12 premios Tony.
Para el cine, habría que salvar la
censura que consideraba el musical como una diversión de índole familiar y el
lado oscuro de la prostitución es suavizado con la historia de Dulce Caridad,
que se presenta como una chica inocente que sueña con el amor verdadero, pero
se decepciona con todos los hombres con los que se cruza en el camino. Trabaja
como acompañante-bailarina en un cabaret donde todos tratan de aprovecharse de
ella. Hasta que encuentra a un hombre honesto, que al parecer le cambiará la
vida. Es a través de la música y la danza como Fosse introduce el componente
dramático sobre el tema de la prostitución. Desde el inicio, como sucede en
“Las Noches de Cabiria” se establece el deambular de la protagonista que vive
su vida con la naturalidad que el sistema le impone, y con la coquetería y la
gracia de su condición femenina se malgasta en lo fútil y se disipa en las
vicisitudes de lo cotidiano.
Bob Fosse elije para el filme a la
actriz Shirley McLane, comediante y bailarina que se encontraba en el pináculo
de su carrera y realiza una de las cintas más completas en lo relativo a la
expresión dancística de la época. La versión para el cine permite ampliar el
abanico de posibilidades e introducir un par de números musicales que no son
posibles para el teatro, como el paseo por la ciudad acompañada, la dulce
Caridad, por una banda que toca por y para ella. El cine también permite un
serio trabajo de introspección por parte de los actores, en este caso de la
actriz principal, que gracias a su madurez consigue una amplia gama de matices
e invita a la reflexión.
Parte importante del éxito de este
musical es la compleja y completa partitura de Cy Coleman que se complementa
con las letras compuestas por Dorothy Fields. Que sin perder su tono festivo,
inherente a la danza y la música, analizan la condición femenina y describen en
lo esencial las vicisitudes de este componente de la civilización: las mujeres
que ejercen el oficio más antiguo del mundo.
Autor: Rafael Fernández Pineda. Cancún,
Quintana Roo, México.