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DERECHO A LA CULTURA A RANGO
CONSTITUCIONAL
* Rumbo a un Camino Correcto
Por unanimidad de votos, la Comisión de Puntos
Constitucionales de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión aprobó por,
el dictamen por el que se reforman los artículos 4º. Y 73 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, para incorporar el derecho a la
cultura a rango constitucional y otorgaba facultades expresas a la Cámara de
Diputados para legislar en materia de derecho de autor y otras figuras de la
propiedad intelectual relacionadas con la misma y expedir leyes de coordinación
entre los tres niveles de gobierno y los sectores social y privado.
En el dictamen se consideró lo
establecido en el Programa Nacional de Cultura del Plan Nacional de Desarrollo
2007-2012, así como las obligaciones contraídas por el Estado Mexicano en la
Declaración Universal de Derechos Humanos, la Conferencia Mundial sobre
Políticas Culturales, la Declaración de la UNESCO sobre Diversidad Cultural y
la Convención sobre la Protección y la Promoción de la Diversidad de las
Expresiones Culturales de la UNESCO.
De acuerdo al dictamen aprobado, el texto
constitucional tendría las siguientes reformas en sus: “Artículo 4, párrafo IX
“Toda persona tiene derecho al acceso a la cultura y al disfrute de los bienes
y servicios que presta el Estado en la materia, así como el ejercicio de sus
derechos culturales. El Estado promoverá los medios para la difusión y
desarrollo de la cultura, atendiendo a la diversidad cultural en todas sus
manifestaciones y expresiones con pleno respeto a la libertad creativa. La Ley
establecerá los mecanismos para el acceso y participación a cualquier
manifestación cultural”.
El Artículo 73 quedaría en su fracción
“XXV.- Para establecer, organizar y sostener en toda la República escuelas
rurales, elementales, superiores, secundarias y profesionales; de investigación
científica, de bellas artes y enseñanza técnica, de escuelas prácticas de
agricultura y minería, de artes y oficios, museos, bibliotecas, observatorios y
demás institutos concernientes a la cultura general de los habitantes de la
nación y legislar en todo lo que se refiere a dichas instituciones; para
legislar sobre vestigios o restos fósiles y sobre monumentos arqueológicos,
artísticos e históricos cuya observación sea de interés nacional; así como para
dictar las leyes encaminadas a distribuir convenientemente entre la federación,
los estados y municipios el ejercicio de la función educativa y las
aportaciones económicas correspondientes a ese servicio público, buscando
unificar y coordinar la educación en toda la República. Los Títulos que se
expidan por los establecimientos de que se trata surtirán sus efectos en toda
la República”.
De ser aprobado por el pleno de la
Cámara de Diputados, este dictamen sería enviado a la Cámara de Senadores para
su eventual aprobación, así como a los poderes legislativos de las entidades de
la república y, de esta manera, concluir su proceso legislativo para que el
Titular de la Administración Pública Federal, en ejercicio de sus facultades y
atribuciones constitucionales, la promulgue en el Diario Oficial de la
Federación para que surta sus efectos constitucionales obligatorios en todo el
territorio nacional.
Cuando escribimos que las tareas de la
Cultura son responsabilidad del Estado apuntamos que “A la par con esto es
prioritario abrir a todos los niveles los espacios y las distintas expresiones
culturales. El Estado, a través del gobierno y sus instituciones debe
garantizar el efectivo derecho a todos al acceso y disfrute de la Cultura,
sensibilizando a la sociedad acerca de la importancia que tiene la cultura en
el desarrollo integral del país”.
“En ese esfuerzo, se trata de vincular
el desarrollo económico, político y social del país mediante instituciones
culturales públicas, privadas y sociales adecuadas a la modernidad para
facilitar el acceso a la cultura a todos los ciudadanos; fortalecer la
protección y conservación del patrimonio cultural y apoyar las actividades de
promoción y difusión de la cultura y su financiamiento”. Vamos por el camino
correcto.
Autor: Raúl Espinosa Gamboa. Cancún,
Quintana Roo. México.