Minorca, España, a 5 de marzo de 2009.
Antes de entrar en materia, quisiera
llamar tu atención en torno a un punto que a mi juicio tenemos muy escasamente en
cuenta.
Ello es que Internet constituye para
nosotros una fuerza que rara vez aprovechamos para a difundir lo que nos duele,
alegra, motiva e interesa.
Seguramente si utilizásemos con
frecuencia, eficacia y racionalidad las ventajas que supone este instrumento de
comunicación masiva y sin obstrucciones.
, MUCHAS ENTIDADES PÚBLICAS Y PRIVADAS
SE LO PENSARÍAN DOS VECES ANTES DE PERPETRAR ABUSOS y extorsiones CON todo lo
cual SE lesionan GRAVEMENTE LOS DERECHOS E INTERESES DEL MODESTO Y DESAMPARADO
CONTRIBUYENTE, NO IMPORTA DÓNDE RESIDA O cuál SEA SU NACIONALIDAD.
Te invito, pues, a discernir con toda
claridad en lo sucesivo los propósitos y viabilidad de los mensajes que
recibas, tomando conciencia de la capacidad de respuesta que la red de redes
pone en tus manos para tratar de servirte provechosamente de ella en tu
beneficio y en el de tu prójimo cuando según tu leal criterio así proceda.
Tanto si moras en España como si no,
supongo no escapará a tu percepción la verdadera epidemia de corrupción generalizada
a Que hoy nos toca asistir. Esa LACRA MUNDIALIZADA PROSPERA Y SE AFIANZA más y
más GRACIAS A LA RESIGNACIÓN CON QUE SOLEMOS ENCARAR LAS cosas de esta
naturaleza que les suceden a otros. Empezamos por aceptarlas como inevitables,
como lógicas consecuencias de un estado de cosas frente al que nada podemos
hacer, como males menores que forman parte del lote que a cada cual le
corresponde en el corolario de sinsabores y contrariedades a que mayormente se
reduce la lucha por la existencia para el común de los mortales. Es así que
vamos creando y fortaleciendo la dinámica del despropósito y la superchería sin
sospechar tan siquiera en que estas cosas acabarán tarde o temprano por
sucedernos a nosotros mismos. Y entonces probablemente nos reprocharemos no haber
tenido en su día las suficientes agallas para enfrentar tan siniestro panorama
abiertamente y a su debido tiempo.
Es el caso que la Compañía Endesa, de la
cual antes dijimos goza de la prerrogativa del suministro de energía eléctrica
a sus multitudinarios clientes españoles, monopolizando dicho privilegio pese a
las limitaciones legales impuestas mediante preceptivas autorizaciones
estatales respecto a la cuantía y periodicidad en el cobro de tarifas por tales
servicios, posee sobrados mecanismos de presión para que las subidas anuales de
tales precios se ajusten más o menos escrupulosamente a la tasa de beneficios
que prevea lograr en el transcurso de cada ejercicio.
Tengo entendido que existen en Europa
recomendaciones e incluso disposiciones normativas en torno a la conveniencia
de que los monopolios desaparezcan fomentándose de tal modo las garantías del
consumidor por oposición a la codicia y voracidad de aquéllos, de donde cabría
suponer que tal situación tiende a ser anómala por lo que respecta a nuestro
país, siendo así que ninguno de los gobiernos que hasta la fecha se han
sucedido, osó hasta ahora cuestionar la omnímoda hegemonía en solitario de esta
todopoderosa Corporación, Endesa, que aquí en las Islas Canarias se llama
Endesa-Unelco, SIN QUE YO TENGA CLAROS LOS MOTIVOS DE TAL DENOMINACIÓN.
Pues bien ; ENTRANDO YA EN MATERIA, ES
EL CASO QUE, DE UN TIEMPO A ESTA PARTE Y sin previo aviso, EN CONTRA DE LA
PROPIA REGULACIÓN GUBERNAMENTAL DE LAS SUBIDAS ANUALES Y SIGUIENDO LO QUE A
TODAS LUCES PARECE CONSISTIR EN UNA CONDUCTA CAPRICHOSA Y MALINTENCIONADA,
dicha Empresa ha comenzado POR SÍ MISMA a aplicar unos baremos absolutamente
desproporcionados de facturación cebándose de modo particularmente enconado en
los sectores más desfavorecidos de la población y sin que tan exorbitantes
cantidades se correspondan en absoluto con el consumo real de sus abonados. Se
quiso atribuir tan lamentables y sistemáticas estafas en principio a supuestos
errores burocráticos o de computación, pero semejante excusa queda desmontada
si nos atenemos a la reiteración con que tales desfases ocurren y a las
ignominiosas reticencias de la Compañía para emitir al respecto cualquier
explicación ni mucho menos para dar marcha atrás en el encono y desmelenamiento
de sus latrocinios. Así pues, tamaños fraudes llevan todas las trazas
repracticarse con pleno conocimiento de causa y de efectos, respondiendo única
y exclusivamente a una sistemática campaña de acoso y derribo orquestada, según
todas las apariencias semejan delatar- en
contra de las economías más débiles, con la connivencia por inhibición de un
gobierno cuyo deber sería no consentir la infamante cadena de abusos por parte
de Endesa, y que con su culpable indiferencia ante semejante sarta de
incalificables delitos está dando rienda suelta a los desmedidos afanes
recaudatorios de esa Corporación, en
detrimento precisamente del ya de por sí muy escaso poder adquisitivo que
golpea a las familias más castigadas por la galopante crisis financiera que en
España reviste toques de enorme virulencia.
Esto es, nunca está demás repetirlo,
Endesa estaría llevando a consecuencias extremas su vocación depredadora y su
patente menosprecio por la legalidad española, ensañándose de preferencia,
despiadada y conscientemente, con padres de familia numerosa, jóvenes en busca
de su primer empleo, jubilados,
propietarios de pequeñas y medianas empresas, perceptores de subsidios y
pensiones no contributivas, gente acribillada por el paro y por las deudas,
etcétera.
Las Oficinas Defensoras del Consumidor
de los distintos ayuntamientos a lo largo y ancho del país rebosan literalmente
de reclamaciones interpuestas por usuarios que se consideran estafados, y el
tema cobra un cariz tan escandaloso y descontrolado que el gobierno, urgido a
ello por múltiples y explícitas denuncias publicadas por medios de difusión de
ámbito nacional, ha urgido la devolución de las cantidades defraudadas por
Endesa, limitándose dicha corporación a reducir el montante de los recibos por
un mes para volver al siguiente con incrementos aún más astronómicos, lo que
induce a pensar en inequívocos indicios de que todo esto se hace con ánimo de
burlar por un lado la autoridad estatal y por otro la buena fe de los usuarios
en detrimento del os cuales se incurre en comportamientos tan descabellados,
quedando realzada la magnitud de tales fraudes porque la mayoría de ellos se
practican sin la menor atenencia al consumo real, incluso en supuestos de
inmuebles que permanecen deshabitados durante buenas porciones del año por sus
propietarios que los tienen en calidad de segundas viviendas.
La magnitud del desbarajuste es tal, que
si nuestra sociedad se hallase más concienciada acerca de sus derechos y de los
mecanismos habilitados para hacerlos valer, si nuestra capacidad de protesta no
estuviese aletargada por la sobrecogedora apatía que por doquier parece
prevalecer, ya se habría presentado una demanda judicial colectiva en contra de
Endesa, exigiéndoles daños y perjuicios, bajo la dirección de Organismos
competentes que pongan a disposición del creciente número de perjudicados las
vías adecuadas y los profesionales más solventes.
Por lo que al autor de estas líneas
respecta, debo decir que cuando no habitaba esta vivienda pagaba 33 euros de lo
que se conoce como mínimo consumo, siendo así que tras comenzar a morar aquí
los recibos han ido aumentando de 56 a 112 euros, siendo el último que pagué
recientemente de 147 euros, sin que mis gestiones para esclarecer tan anómala
situación hayan dado otros resultados que la recomendación por parte de
representantes locales de Endesa en el sentido de que me haga con los servicios
de un electricista para que revise la instalación.
En estas condiciones rayando mi economía
en la precariedad, me planteo incluso la alternativa de negarme a pagar el
próximo recibo si no se ajusta al consumo real. Siendo quien esto escribe
persona ciega total que VIVE SOLA Y CONSIGUIENTEMENTE no hace a ningún efecto
uso de la luz eléctrica más que por lo que se refiere a aparatos domésticos
convencionales (equipo de música, ordenador, nevera, microondas etc.), los
criterios de facturación que se me aplican tienen todas las trazas de
inscribirse en el marco de agresiones intolerables y sistemáticas a las
economías mas depauperadas, a las de quienes se supone desconocemos los medios
más Accesibles Y EXPEDITIVOS para nuestra defensa y vamos a continuar pagando
toda vez que se trata de un servicio imprescindible y no de un lujo o gasto
suntuario. Con todo, yo me planteo la posibilidad de negarme a pagar el próximo
recibo si aprecio en el mismo las vergonzantes irregularidades a que me vengo
refiriendo, aun cuando ello me suponga sensible quebranto, al privárseme de
suministro de energía eléctrica en una zona periférica donde tal carencia no
puede solventarse con igual facilidad que en otras áreas de población mejor
dotadas.
Por favor, te ruego no conceptúes esta
comunicación como equivalente a otras que probablemente recibirás con encargos
dispersos y poco claros, anunciándote catástrofes u otros contratiempos si no
las difundes, etcétera. Sé que esto es deplorablemente sintomático en el
sentido del pésimo uso que hacemos de Internet, pero lo que aquí nos jugamos es
la dignidad y la estabilidad económica de miles de familias que están siendo
groseramente lapidadas por los autores de un fraude de monstruosas
proporciones, absolutamente sin precedentes en el tráfico económico español,
tanto más grave si se tiene en cuenta que viene practicado con la más absoluta
impunidad mediando inhibición culpable por parte del Gobierno nacional, al cual
espero sepamos corresponderle en las próximas elecciones con el varapalo que a
todas luces acredita merecer.
Lo que te pido es, sí, que difundas este
mensaje, pero sólo lo hago en la convicción de que tu noble gesto, reforzado
por idéntica actitud proveniente de
mucha otra gente, evite la más espantosa bancarrota de economías familiares ya
casi totalmente esquilmadas por los devastadores efectos de una crisis que
según estimaciones de expertos es muy superior en dramatismo e intensidad a
cualquier otra que haya conocido la economía de este país.
Por favor difunde esto a los máximos
niveles que te sean accesibles, incluso entre personas que no sean tus
habituales contactos, y cuyas direcciones obren en tu poder por las más
diversas causas. Harás un gran servicio a mucha gente, y te predispondrás a que
mañana, cuando tú lo precises, otra gente esté ahí para expandir lo que te
ocurra cara a posibles soluciones.
Si nuestros problemas se agrandan hasta
adquirir marchamo de irresolubles, ello obedece fundamentalmente al hecho de
que somos incapaces de publicitarlos. En la unidad de acción radica una buena
parte del éxito de nuestras campañas. Estoy más que convencido de que es grande
el número de gente que estaría dispuesta a cooperar, pero tales personas se
hallan maniatadas por la inercia imperante y por la resignación a que las cosas
tengan que ser justo como son.
Si como te sugiero vas a hacerte eco de
esta mi propuesta, toma las debidas precauciones para preservar tu anonimato en
previsión de nunca descartables represalias, si bien yo estoy dispuesto a
proporcionarte mis coordenadas completas cuando lo desees. Encárgate de aclarar
a las personas a quienes hagas llegar esto que no eres directamente responsable
de su contenido, que te limitas tan sólo a reenviarlo en señal de buena
voluntad y de identificación con el contenido de las líneas que acabas de leer.
Desde ya me pongo por descontado a tu
plena disposición para hacerme con sumo gusto eco de todas las inquietudes que
necesites compartir con otras personas, así como para difundir todo aquello
cuyo público conocimiento estimes redundaría en tu beneficio o en el de las
personas de tu entorno.
Te hago llegar mi más cálido y
respetuoso saludo, en el bien entendido de que, si bien agradezco en los
términos más vivos y sinceros una favorable acogida de la propuesta que atrás
dejo formulada, sabré entender los motivos que pudieran llevarte a rechazarla.
Sólo una última reflexión que no hace sino abundar en el sentido
general del presente escrito : lo que hoy hacemos los unos por los otros,
regresará mañana a quien lo hizo en forma de magnificada compensación, aparte
del enorme y legítimo placer que experimentamos ante el convencimiento de haber
hecho algo justo por nuestros semejantes.
Te saluda muy atentamente, Jocla
José Claudio Suárez.
En 2009 se conmemora mundialmente el
NACIMIENTO DE LUIS BRAILLE.
HONREMOS CON FE, ENTUSIASMO, AMOR Y
GRATITUD AL CIEGO MÁS GENIAL DE TODOS LOS TIEMPOS.
ÉL SACÓ A SUS HERMANOS DE INFORTUNIO DE
LA PREHISTORIA, IDEANDO EL MARAVILLOSO CÓDIGO DE LOS SEIS PUNTOS que
significaron cultura, aprendizaje, trabajo y redención para una minoría
excluida del saber y del progreso.
Gracias a él unas manos pueden leer lo
que otras escriben. ¡Benditas sean su obra y su memoria!