México, D.F. a
11 de julio de 2006.
Aunque no he
leído más que una parte de lo que ustedes incluyen, el sólo ver la imagen de su
contenido me entusiasma; ¡que magnífico trabajo, y yo sin conocerlo! No tengo
perdón.
Reciban el testimonio
de mi sincera admiración.
Gerardo
Unzueta.