El vuelo de la paloma.
Canta mi paloma
notas tormentosas,
Sus ojos brillan sin
piedad
y la espada del
orgullo atraviesa su bondad.
Canta mi paloma
un cometido ajeno a
su naturaleza,
y para mi sorpresa
encuentro invisible
su dulce belleza.
Canta mi paloma
y al hacerlo
desafina,
intenta controlar su
voz asfixiada
no advierte cómo el
canto la lastima.
Puedo sentir su
corazón gritar
exigiendo al canto
parar,
pero ella no lo
escucha
y continúa clavando
sus garras.
Mi paloma canta la
última nota,
un adiós definitivo
es lo que ordena.
Su corazón
desesperado me pide ayuda,
pero no puedo impedir
lo que dicta su fortuna
el adiós de mi
paloma,
y me quedo vacío,
la veo alejarse con
la soga al cuello,
sólo soy parte ahora
de su olvido.
En un témpano de
hielo me he convertido,
a cuchilladas me
desplomo,
siempre frío y sin
sentido,
sin remedio al fatal
destino.
Porque a mi paloma he
perdido
y con ella a mi única
amiga,
sólo queda la
cicatriz viva
donde sus garras mi
pecho han herido.
Se marcha con un
suave aleteo,
me deja sin digna
despedida.
Se va con el bellaco
y no hay salida,
sus alas ha entregado al vuelo.
Autora: Rosa Vanessa Lazo
Charur.Monterrey, México.