La hambruna de los libros.
La lectura
es un Derecho Universal e incluye a las Personas con Discapacidad Visual. Es
una experiencia intelectual, social y emocional, leer libros, periódicos y revistas,
no exceptúa a las Personas Ciegas que nos deleita la lectura. Más
todo lo contrario sentimos cercenados nuestros Derechos, consagrados en la
Convención de las Naciones Unidas para las Personas con Discapacidad.
La ceguera
que me acompaña desde los once años, coartó el placer de seleccionar los
libros, cuentos y poesías que me apetecían leer. Para accesar a la lectura,
dependía de los ojos del amigo, familiar o compañero solidario, a duras penas,
leí los libros académicos para mi formación, quedando el sinsabor de los libros
que anhelaba leer. No obstante, eso no nos garantizó gozar de los conocimientos
que guardan los libros.
La
experiencia personal, la capacidad de procesamiento interno que proporciona la
lectura directa de algo sin que medie un interlocutor, ya sea real o digital,
no es sustituible por ninguna otra experiencia, eso lo aceptamos, lo cierto es
que las herramientas ya existen y los que amamos los libros tenemos el problema
resuelto con el Derecho a la Accesibilidad a la Lectura tipificado en el
Tratado de Marrakech.
Este Tratado
es un instrumento legal que permite facilitar el acceso a las obras publicadas
a las personas ciegas con discapacidad visual o con otras dificultades para
acceder al texto impreso, brinda una oportunidad sin antecedentes a esta
población.
Cuando
quiero leer un libro, hay dos hechos esenciales: elegir el libro correcto y
leerlo completo. Y ahí es donde el Tratado de Marrakech me ayudará al
incrementar la cantidad de libros a los que tendré acceso y al permitirme
encontrarlos en todo el mundo y, en particular, en el mejor de todos los
lugares: una biblioteca, contribuirán a hacer que el sueño de los ciegos
panameños se cristalice.
El Tratado
de Marrakech, trae consigo la promesa de eliminar las barreras que han dificultado
nuestro acceso a los libros en formatos que podamos leer y a compartir aquellos
de los que disponemos con nuestros congéneres con discapacidad visual de los
países latinoamericanos, los que hasta ahora, no han podido acceder ni a los
pocos libros de los que se dispone.
El Tratado
de Marrakech en nuestro país, fue firmado por el Órgano Ejecutivo y ratificado
por el Órgano Legislativo (Asamblea Nacional) mediante Ley 9 de 2016, y
esperamos con fruición su implementación. En este sentido, Panamá ha dado los
primeros pasos para la implementación del Tratado, que mediante algunas
excepciones a los derechos de autor y la apertura al intercambio
transfronterizo de obras en formatos accesibles, permitirá mejorar
sustancialmente el acceso a la información y a la cultura para las personas
ciegas y con baja visión del país.
Es
importante que este proyecto de ley se apruebe, pues así las personas con
Discapacidad Visual vamos a tener no solo la garantía de un Derecho, sino
también la facilidad de permitir a las Personas con Discapacidad Visual ejercer
libremente su derecho a la información y a la cultura.
Autora:
Elodia Magdalena Muñoz Muñoz. Panamá, Panamá.
Comunicadora
social.