Juventud con y sin discapacidad.
12 de agosto.
A la Juventud con y sin discapacidad, Generación de
“reinventistas” del Progreso y Desarrollo que necesitan nuestros Países, les deseo
éxitos en sus propósitos en el Día Internacional de la Juventud. Ánimo aunque
la Realidad sea excluyente y frustrante; particularmente hacia los jóvenes con
discapacidad sensorial, física, mental e intelectual.
Según las Naciones Unidas, iniciando el Siglo XXI, 1.2 Billones de
personas entre 15 y 24 años, cerca del 18% de la Población mundial y 25% de la
población en edad laboral eran Jóvenes. Mayormente en Países en vías de
desarrollo, gran parte en zonas rurales de Asia, África y América Latina y el
Caribe.
Un Estudio realizado por el CELADE a principios de esta década
concluía que la pobreza, acceso a la educación, deserción escolar, exclusión
social, migración y efecto demográfico, afectaban especialmente a los Jóvenes
de zonas urbanas de América Latina y el Caribe y transformaban su Realidad.
Empero, ambos Organismos se refieren sólo a la Juventud en
general, sin información ni estadísticas sobre discapacidad; vacío que junto a
las secuelas que dejará la Pandemia causada por el COVID-19, implicará que el
porcentaje de la Población de Jóvenes, y sus necesidades incumplidas, serán
mucho mayores.
En muchos de nuestros Países con poco crecimiento económico,
corrupción, preocupantes niveles de pobreza severa y crítica, alta Tasa de
desempleo y economía informal, violencia, discriminación, falta de acceso a
educación de calidad y elevados niveles de deserción escolar, poco acceso a la
salud, migración y a otros derechos humanos fundamentales; aunado a las
Pandemias Económica y Social que se avecinan, serán factores que afectarán más
a sectores vulnerables y Grupos en situación de Vulnerabilidad, especialmente a
las personas con discapacidad (PCD).
En el Día de la Juventud que celebrará el Estado ¿se incorporará a
los Jóvenes con discapacidad?; ¿participarán activamente en las celebraciones,
atendiéndose su descripción de la Realidad, necesidades y anhelos? O su olvido
voluntario se deberá al “Alzhéimer Pandémico del COVID”.
Quizás, al igual que en otros años y Gobiernos, los jóvenes con
discapacidad no tendrán participación real; tal vez algunos posarán para los
eventos, fotos y videos instrumentalizando su imagen y mediatizando falsamente
su participación.
Planes y Medidas populistas económicamente insostenibles y
discursos maquillados serán los medios más utilizados para encubrir la
exclusión y la Espiral de violación a derechos y libertades fundamentales de
Sectores vulnerables y en situación de vulnerabilidad, principalmente PCD,
Jóvenes y adultos mayores.
Los que se aprovechan de la juventud y las PCD, sobre todo
Políticos y el Estado, saben que el cumplimiento de derechos y libertades
fundamentales, no se realiza violando Normas; tampoco las acciones que
satisfacen necesidades y posibilitan la participación se ejecutan con discursos
deslucidos y promesas rotas.
Mientras la Legislación no deje de cambiarse ideológicamente y,
por el contrario, se armonice con la Constitución, Convención sobre los
derechos de las Personas con Discapacidad, Convención sobre los derechos del
Niño y otros Tratados de derechos humanos, los jóvenes con discapacidad
seguirán siendo relegados y estigmatizados.
Parte indeterminada de niños, niñas, adolescentes y jóvenes con
discapacidad sin acceso a sus derechos y libertades fundamentales; vulnerables
a ser víctimas de explotación sexual y comercial, violencia delincuencial,
terrorista e intrafamiliar. En fin, sin beneficiarse, ni participar en el
proceso de desarrollo económico y social.
Pese a que la Juventud es cada vez más relevante para Organismos
Internacionales y Regionales; contrariamente, para los Órganos del Estado e
Instituciones Gubernamentales, incluyendo las de Juventud, Partidos Políticos y
diversas Organizaciones de la Sociedad Civil, es un Sector de interés
ideológico, partidario y económico. Mientras tanto, en la marginada Juventud
con Discapacidad en situación de pobreza extrema y crítica en zonas urbanas y
áreas rurales, se repite el ciclo intergeneracional de la Pobreza.
Aunque la ONU diga que son el Sector imprescindible para el avance
de las Sociedades en las que habitan y determinantes en el Cambio social,
desarrollo económico y el progreso técnico; en Países como el nuestro, cada vez
les es más difícil escapar de la trampa social de nacer pobre para morir pobre,
máxime si se tiene discapacidad.
Gobiernos y Sociedades deberían reflexionar sobre cuál es la
importancia y participación que nos dan a las PCD; si la Juventud, ese sector
imprescindible, serán valorados como Seres Humanos con dignidad y derechos, no
como porcentaje de votos para Elecciones, ni personas fáciles de
instrumentalizar para alcanzar sus objetivos ideológicos y políticos.
Autor: Alexander Kelman
Rodríguez. San Salvador, El Salvador.