¿El éxito es para todos?

 

La palabra éxito significa resultado feliz o positivo, alcanzar lo que se desea, aceptación de una o más personas, supone la paz personal, satisfacción de haber llegado a donde se planeó, proviene del latín exĭtus, que significa salida, según las circunstancias esta palabra tomará su contexto basado en quién la use y del momento.

Pero, el éxito, además de tener significado, cuenta con incógnitas, por ejemplo: ¿es para todos?, ¿quién decide a quien sí y a quien no?, ¿cómo alcanzarlo?, ¿podría llegar a él y no notarlo?, ¿es cuestión de edad, raza, situación económica?, ¿de qué depende?, ¿quién determina que hemos llegado?, ¿se requiere a otra persona para llegar?, ¿es cuestión de valentía o algún otro sentimiento para que funcione?, entre otras preguntas.

Puede relacionarse al dinero, amor, educación, situación social, juegos y un sinfín de opciones.

¿Qué sentimientos puede despertar el llegar al éxito? Amor, odio, tal vez rencor, ambición, en ocasiones esperanza. No lo sé, creo que puede ser tantas cosas, quizá despertar grandes emociones y apagar el fuego intenso de una ilusión.

Hace unos días, me encontré con unos amigos, a quienes llamaré E1 y E2, me invitaron a comer, accedí y noté sus caras de sorpresa, pregunté el motivo y se limitaron a decir: es que hay quienes, por tener un título o un buen sueldo, elijen alejarse de quienes hace tiempo fuimos amigos; tú estás soltera y vemos que viajas mucho; no imaginamos tu sueldo, nos sorprende que digas que sí; se ve que has alcanzado el éxito.

 Era claro que tenía que dar una respuesta, amo viajar, no tienen idea de la forma tan limitada en que lo hago, todo de lo que me privo para poder estar en esos lugares, es una gran ventaja no tener hijos, recibir el apoyo de mis padres y además, tener el tiempo de hacerlo; pero, si me lo preguntan, no me siento exitosa, no sé qué significa serlo, no podría decir que he llegado a ese punto en este momento de mi vida, solo por viajar. Comenté que me siento exitosa por tener a mis padres, por tener un trabajo, por tener amigos, por amar a alguien, por tener una mascota, por tener a personas que están ahí para ayudarme a ser mejor persona, pero, lo demás, no sé, ¿eso es éxito?... Hablamos de quienes en ese momento eran “exitosos”, los populares de la escuela, y que después terminaron con trabajos que nuestra expectativa no tenía, pero, ¿quién puede calificar que llegaron o no al éxito?, hay quienes eligieron una familia, irse a otros lugares; perder contacto, hay quienes, lamentablemente, perdieron la vida; así que, por ser lo que uno no imaginó, ¿fallaron, no tuvieron éxito?

Ese día la pasé muy bien, regresé con miles de preguntas, no sé por qué, en lugar de solo ir a pasarla bien, tengo que analizarme la vida. En fin, así pasó y me di a la tarea de preguntar a quienes me rodean: ¿soy exitosa? ¿Por qué? ¿Te consideras exitoso, por qué? ¿Qué significa serlo? ¿Depende de algo?... Todas las respuestas llevan a lo mismo: ser exitoso es recibir aplausos, reconocimiento social, solvencia económica, casa, carro, entre otras cosas materiales. Vaya sorpresa, todo tiene que ver con cosas, con el qué dirán; creo que ninguno de ellos se ha sentado a buscar la palabra en el diccionario y es que en ningún lugar su significado dice fama, dinero, muchas parejas, ni siquiera dice que hay que dar conferencias, ser reconocido por más de cierta cantidad de personas, no incluye ni la cantidad de aplausos que se tendrían que recibir para lograrlo; no dice nada de plasmar nuestros nombres en títulos, tampoco nos indica que hay que tener más de 2000 amigos en redes sociales; o cierta cantidad de mensajes, tampoco la cantidad de amigos a frecuentar, pero sí dice que la aceptación personal o en grupo es importante. Eso nos lleva a concluir que la palabra éxito, depende de otros para definir a un individuo si ha logrado alcanzarlo o no.

Lo que tal vez no han leído es que incluye un apartado personal, donde cada uno se fija ciertos requisitos emocionales a cumplir para llegar.

La diversidad en el ser humano, nos permite fijar a cada uno metas que dependen de nuestra condición, social, emocional, corporal, mental, profesional, etcétera, por lo que brinda un abanico de oportunidades para que nadie se quede sin llegar, a la tan famosa palabra “éxito”.

Éxito:

Sonreír, para el que siente tristeza.

Pronunciar palabras largas y correctas, para quien presenta trastornos de lenguaje.

Ver, para quien tenía cataratas.

Amar, para quien sufrió decepciones.

Viajar, para quien ahorró por largos meses.

Caminar, para el bebé que empieza con una nueva etapa.

Y mucho más…

Al éxito se llega cuando cada uno de nosotros elige hacer lo que ama, se compone de fe, paciencia, perseverancia, fuerza, lucha incansable, confianza, agradecimiento, amor, ilusión, esperanza…

¿Soy exitosa?

No lo sé, muchos dicen que lo logré...

 Yo solo deseo expresar mi agradecimiento por tener a quienes me han inspirado e impulsado a ser quien soy, por no desistir, ni considerarme un caso perdido, porque mi vida se ha llenado de etapas y en cada una de ellas, quienes me rodean ocupan un lugar especial, me siento exitosa por tener: a mis padres, que me permiten volar, a mi hermano que es mi fiel acompañante en las desveladas, mis amigos que me alegran el día, Sonia, Wendy, Marisol, a mi loquita que me da masajes, consejos de luchadora, Nayelli, a mi pañuelo de lágrimas, mi cómplice, amiga Patricia, a mi emprendedor, mi fiel amigo, Benjamín, a mi grupo de mosqueteras, Elizabeth, Faviola, Angie dark, porque mis días sin ustedes, les garantizo, no tendrían color; amo comer con ustedes, a mi nueva amiga Jocabed, quién diría que en poco tiempo ocuparías un lugar en la lista de mis amistades, gracias por tomarte el tiempo de estar ahí, justo en el momento en el que lo necesito, a mi querida Jessy darwina, nadie me mete en tantos embrollos académicos como tú, a mis amigas culturales Anel y Kelly, la vida me ama, con ustedes me lo demostró. A mi admirable editora Laura, gracias por no perder la confianza y orientarme, porque sin ti, mis textos no tendrían el mismo sentido, siempre das con el punto exacto. Los amigos existen para dibujarnos sonrisas, Citlalli, Ana, Gabriela, Wendy, David, Jazmín, Belém, Beatriz, Cristina, Valeria, Guadalupe, Aracelí, Jesús, David, Rebeca, Laura, Fátima; a mis queridos profesores, Verónica, Raúl, Javier, Ernesto, Itzel, Hanzel, Minerva, Erika, Sandra, Erandi, a mi cómplice, a mi impulsor, a quien jamás me permite desistir, a ti, infinitas gracias , Víctor, muchas gracias, por todo, por tanto y por siempre.

Exitosa, afortunada, rodeada de personas invaluables, tesoro que he conseguido a lo largo del tiempo.

¿Aún dudas de tu éxito?

 

Autora: Elsa Yatzaré Soto Rocha. Naucalpan, Estado de México, México.

Licenciada en Optometría.

yatzaresoto@hotmail.com

 

 

 

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