Co-producción como estrategia de mejora de
ambientes escolares en Educación Media Superior. Caso CONSTRUYE T
En la actualidad los esquemas de intervención del
gobierno han rebasado los límites de las instituciones y organizaciones
gubernamentales, para incorporar y, en otros casos, permitir el ingreso de la
sociedad civil (además del sector empresarial) al diseño, implementación y
evaluación de políticas públicas. Esta propuesta de atención a problemas
sociales en conjunto con la sociedad, o parte de ella, se ha constituido en una
nueva faceta de organización, empoderamiento, gobernanza y legitimación de las
estrategias del gobierno.
Esta nueva estructura de intervención se ha
denominado co-producción de servicios públicos. Si bien el concepto no es
nuevo, y podría decirse que desgastado en los discursos y propaganda política,
se ha dado un giro a fin de reenfocar las acciones del gobierno y volver más
eficientes los recursos a su alcance, donde la ciudadanía no sólo sea vista
como el cliente de la política sino también como parte de los mecanismos de
producción de los servicios públicos.
En México estos esquemas de reingeniería
organizacional entre lo público y lo privado se ha gestado en distintos ámbitos
de la vida pública, ya sea en el diseño de políticas, en el caso de
En el ámbito educativo estas estrategias se
presentan principalmente en los procesos de implementación de estrategias, en
la que el gobierno establece la directriz de actuación e involucra a la
sociedad civil en el proceso de gestión. Tal es el caso del programa Construye
T. Esta intervención tiene como objetivo el fortalecer las capacidades de la
escuela para desarrollar habilidades socio emocionales en las y los
estudiantes, y así mejorar el ambiente escolar en los planteles del nivel medio
superior participantes.
Para ello
Bajo los principios de incidir directamente en la
educación integral de los estudiantes del nivel, así como de prevenir conductas
de riesgo, tales como la violencia, las adicciones o el embarazo no deseado,
que pueden truncar su trayectoria educativa. De esta forma las OSC tienen
libertad de promover y gestionar distintas estrategias para atender los
objetivos del Programa, siendo las principales estrategias aquellas que
promueven la convivencia y resiliencia de los estudiantes, cursos y talleres de
educación sexual, así como de formación para el trabajo.
A decir del documento de UNICEF Programa Construye
T en escuelas de nivel medio superior, para el desarrollo de proyectos de vida
y prevención de riesgos en adolescentes, tan solo en el ciclo 2010-2011
sistematizó más de 57 mil proyectos, siendo para el año 2012 más de un millón
200 mil estudiantes integrados en estas políticas, demostrando la oportunidad
de eficientar y ampliar los procesos de intervención en la población juvenil
del país. A la par, el documento destaca como uno de los principales logros del
proyecto “la puesta en marcha de un modelo de intervención orientado a
institucionalizar la participación adolescente en las escuelas de nivel medio
superior, con lo cual se hace efectivo el ejercicio de este derecho (de
educación”. UNICEF (2014: 28).
Si bien, el contexto de crisis de imagen
gubernamental, falta de trasparencia y exceso de burocracia forman parte del
imaginario colectivo al momento de cuestionar el actuar del gobierno, también
es necesario integrar a este imaginario las alternativas de vinculación,
sensibilización y apropiación de la acción pública desde la sociedad, por lo
que sería importante valorar el papel que tenemos como ciudadanos pasivos o
reactivos, y ciudadanos participativos en el cambio.
Referencias
UNICEF (2014) Serie Buenas Prácticas elaboradas a
partir de los proyectos e iniciativas implementadas por UNICEF México, durante
el Programa de Cooperación 2008-2013
Autor: Mtro. Daniel Cuellar
Martínez. Tlaxcala, Tlaxcala. México.
daniel_cue_17@hotmail.com