Al mulato San Martín ¿lo relegan de nuevo?

Perú es un país que supera en territorio a Costa Rica en cerca de 25 veces su tamaño.

Tiene muchos lugares interesantes para visitar y el 27 de agosto fecha de mi cumpleaños, me pareció el mejor pretexto para hacerlo.

La primera visita sería en Lima, ahí está el convento de Santo Domingo Construido en el siglo XVI donde sirvió como fraile San Martín de Porres a quien pensé se le profesaba una gran devoción en su tierra natal.

Todos los años en semana Santa, en Costa Rica proyectan películas destacando su vida y obra y solo de paso, se menciona a su coterránea y contemporánea Santa rosa de Lima, también han pasado su biografía por la radio por lo que pensé que su popularidad era bien marcada.

Ya en el convento, nos contaron que solo la decoración del techo tardó 20 años ya que fue hecha de cedro.

Es el primer convento de lima y en la actualidad viven 30 sacerdotes en él.

En el segundo patio, los azulejos son de Sevilla y las pinturas cuentan la vida de Santo Domingo de Guzmán y la Virgen del Rosario que es la madre de la orden.

Hasta aquí, la guía no nos mencionaba a San Martín de Porres que por cierto, escuchaba que le decían San Martín de Porras o san Martín de Porres lo que me llamó la atención.

Ante mi pregunta al respecto, se me dijo que su nombre de pila, era Martín De Porras y que su madre era una Panameña esclava liberta originaria de panamá.

Que su nombre de santo es San Martín de Porres porque la iglesia consideró que “Porras “es un objeto con el que se causa daño y no estaba bien para un santo.

Seguimos los pasillos del segundo patio donde los azulejos fueron pegados con cal, arena, agua y claras de huevo de las aves de la costa.

La torre tiene 50 metros de altura con San Miguel Arcángel y al frente la cúpula desde donde se divisaba toda la ciudad.

Luego entramos a la biblioteca con cerca de 25 mil libros que ya no se pueden consultar salvo con permisos especiales por su fragilidad.

Al frente las pinturas representaban a los sacerdotes con sus hábitos blancos y capuchas negras propios de la orden dominica con 800 años de fundación (creada en el año 1216).

SE muestra un libro que pesa 40 kilos, forrado en piel de oveja y que me recordó los voluminosos textos bíblicos en sistema Braille.

Ahora bajamos a las catacumbas, ahí está parte del cuerpo de Santa Rosa de lima pues sus reliquias están dispersas por el mundo.

Se trata de la primera santa de América, dé padres españoles y familia adinerada, se colocó una corona de hierro cuyas puntas dañaban su cabeza como símbolo de penitencia.

Se le atribuyen cerca de 200 milagros y la protección de lima de los piratas.

Es patrona de la policía y de la fuerza armada peruana y argentina.

Venerada en Uruguay, Paraguay, estados Unidos Europa y filipinas donde se reportan muchas apariciones.

Su casa es ahora un monasterio y la gente deja sus cartas con peticiones.

Los salones de ingreso a la bóveda, son salas muy elegantes con 18 cuadros que se alquila para bodas de personas adineradas.

Santa Rosa muere a los 31 años mientras que san Martín lo hace a los 60 años de edad.

Es el primer santo Mulato de América y cerca de su tumba, está un cuadro de San Juan Macías, español que viajó caminando por ecuador y Colombia hasta llegar a Perú y por eso se le considera el tercer santo peruano que vivió junto con San Martín y Santa rosa en la época de la colonia entre los años 1600 y 1700.

Por fin llegamos a la cripta de san Martín de Porres.

Hijo de padre español y madre panameña, no pudo ser sacerdote por no nacer dentro de un matrimonio.

Fue portero, enfermero, sacaba muelas, cortaba el cabello y las barbas, compraba y preparaba los alimentos y barría.

Se le vio en África libertando a los esclavos y en México atendiendo personas enfermas.

En la cripta se indica que fue canonizado en 1962por el Papa Juan XXIII.

Algunas personas indican que se demoró 300 años en santificarlo por ser mulato, se le representa con una escoba y a sus pies, hay un perro, un gato y un ratón.

De su cuerpo, solo se conserva su cráneo en la iglesia en un cofre de oro.

Su cuerpo o reliquias, está repartido en los altares de muchas iglesias del mundo.

Es protector de los médicos, farmacéuticos y enfermeras.

En una urna se conserva parte de su cama, hay una réplica de su habitación, algunas condecoraciones se indica que murió en noviembre y es todo lo que se presenta de San Martín en dos horas de recorrido por el convento.

Luego en la parte final, visitamos la sala del coro alto donde se reunían, cantaban, ay un libro de 30 kilos de peso con cantos gregorianos y un atril giratorio.

El altar mayor es de estilo neo clásico, la nave central de estilo gótico.

Al salir hacia el mirador de san Cristóbal, nuestra próxima visita, encontramos vendedores de objetos religiosos en su mayoría dedicados a santa Rosa de Lima.

Abordamos un taxi y le pregunté al conductor por la devoción de ambos santos.

Me dijo muchas cosas pomposas de santa “rosita” de lima, mientras que a San Martín me afirmó se le conoce como el santo de los Ratones, gatos y perros.

 

Autor: Roberto Sancho Álvarez. San José, Costa Rica.

robertosancho27@gmail.com

 

 

 

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