Poemas de Clara Sofía Santana Miranda.
EL RÍO
Y
se le transcurrió la tarde
Del
invierno temprano
Con
su caudal marrón jade
Furioso
con el viento
Se
le transcurrió la tarde
En
fúnebre carrera
Empujado
a desaires
Bregando
por llegadas
Le
transcurrió la tarde
En
turbio desliz opaco
Firme
en misión de avance
Magnánimo
en su colapso
Y
se le transcurrió la tarde
Altruista
en su añejo cauce
Soportando
rivalidades
Hasta
llegar el crepúsculo…
Fue
entonces aliviado
Premiado
por el ocaso
Con
serenidad ecuánime
A
su noble grandeza
Dormido
en las maravillas
De
un paisaje despejado
Lucido
en brillos radiantes
Hasta
llegadas las sombras
En
descanso merecido
Relajado
en su tregua
Esperó
a sus compañeras
Hecho
espejo reluciente
La
luna llegó primero
Seguida
por las estrellas
Para
acunarse en las aguas
Del
río que la esperaba
Vestido
de sintonías…
Con
músicas de silencios
En
el andar por la vida
Un
barco lo atravesaba…
Mayo 2016
EN CADA DÍA
Mi viejo corazón
Tiene hoy un alma sabia
Que aprendió de cada acontecer
Imprimiéndolo en su libro
Para que ningún pasado, lo tilde de un
plumazo.
¿Por qué querría borrar mis experiencias?
¡Si ellas fueron maestras en mi vida!
Hicieron de mí, la mujer valiente
Comprensible y tierna en el amar al otro
Sin odios, ni quejas, ni residuos
Aceptar las diferencias ajenas
Sin pretender cambiarlas
Acomodándome a ellas con sazones
Comunes al mundo que hoy andamos.
Alejándome ¡si! Del ser dañino
Que caprichosamente prende hacer daño.
Pero jamás mi entusiasmo palidece
Con engorros de venganza necias.
Para eso está Dios, el que se encarga
De hacer justicia divina, ¡aquí, en la
tierra!
Escuché por ahí, que alguien rezongara
“¿De qué nos sirve ser sabios?
¡Si nadie nos escucha por ser viejos!”
Y a lo mejor es verdad que así ocurra…
Aunque jamás acepte mi conciencia
¡No ser valorada en mis opiniones!
Mi valentía y esmero me empuja
A cultivar los sueños, a sustentar
esperanzas
Que ¡alerta! me mantienen creando.
Sin darme por vencida ante la pérdida
Por ayudar a hacer ¡un mundo mejor, en
cada día!
Viernes 20 de mayo- 2016.
LATIENDO
No
me pidas ni pretendas
te
quiera como adolescente
Pero
si pídeme e intenta que te ame
Con
este corazón viejo y sabio.
Con
estos años libres.
Con
la inteligencia de lo aprendido
en
el transcurrir de la vida.
Sobre
balanzas de bondades
Del
cariño que sabe enfrentar tormentas…
Sin
quejas, ni resabios, sin dudas.
Con
seguridades de sentimiento eterno.
Con
raíces aferrados a la tierra
Y
un follaje color a esperanzas
Floreciendo
sin esperar primaveras
A
pesar de las incontables podas
Que
el hombre necio ocupó como leños
Para
hacer fogatas consumidas en el pasado.
No
me pidas, ni pretendas compaginar mi historia
Para
formar futuros incoherentes
Sólo
ensaya conquistar mis sueños
Alimenta
mi fe, con esperanzas de mañanas
De
un amor emancipado, soberano ¡valeroso!
Y
un corazón latiendo, latiendo, latiendo…
Viernes
20 de mayo 2016
Autora:
Clara
Sofía Santana Miranda. Paraná, Entre Ríos, Argentina.