Prefacio
Existen
muchas reflexiones que nos motivan a soñar, a no rendirnos, a tener una
mentalidad positiva al respecto de soñar. Pero hoy en día ¿Qué implica soñar?
¿Cuáles son esos sueños por los que vale la pena no rendirse? en este corto
escrito reflexivo más que emplear historias con un trasfondo significativo, el
sentido es colocar en perspectiva esta idea que hoy en día puede transformarse
de un sueño en una inesperada pesadilla.
La
alquimia de los sueños
Es
muy común preguntarle a un niño pequeño ¿qué quieres ser cuando seas grande? A
lo que contestarán: bombero; policía; astronauta; como mi papá; como mi mamá;
enfermera; Doctora; princesa; Modelo; conductor; mamá; cantante. La lista sigue
y sigue, pero cuando se llega a la edad de decidir hay dos respuestas
características: “no sé” y “una totalmente distinta a la elegida de niño o que
está cargada de dudas en serlo”
En
este momento nos preguntamos ¿qué pasó con ese sueño de niños?
La
respuesta quizás está en que en nuestra sociedad la inocencia se pierde de
muchas formas, la fantasía, ilusión se ha desvanecido en la verdad inclemente
de los medios de comunicación, además de que algunos sueños tienen una alta
persuasión de factores superficiales. Entonces se podría pensar que el problema
es la mutación en la realidad existente actualmente. Los sueños no concuerdan
con las realidades de nuestra modernidad o dichos sueños pueden dañar la
esencia de ese sueño. Coloquemos por caso el ejemplo de quien quiere ser
modelo, tendrá que seguir un riguroso plan para llegar a serlo, luego de tantos
esfuerzos los resultados pueden traer el efecto florero, mucho por fuera nada
por dentro. Naturalmente hay sueños que son perfectos, que pese a las
dificultades lograr eso soñado trae muchas satisfacciones, la cosa es que en
esta alquimia de sueños, muchos de esos ya son una rara especie en vía de
extinción.
¿Qué
vale un sueño perfecto?
Esa
es la pregunta del millón porque todos soñamos, nos ilusionamos tras la idea de
ser, de lograr, de tener. Sin embargo, las circunstancias van cambiando esos
sueños y al mirar atrás encontramos que no somos en un cien% lo que imaginamos
en algún momento. Entonces el costo de los sueños es ¿esfuerzos, sacrificios,
perseverancia, adaptación, motivación, cambios, apoyo de otros, preparación
académica?
No,
si eso fuera el precio muchos lograrían sus sueños, ser felices, sentirse
plenos. Esa es la pesadilla soñar con algo que de repente se trasforma en algo
que no nos hace estar bien. De tal forma que el precio se trasforma en algo
intangible que precisamente es la clave para soñar en estos tiempos.
¿Qué
es eso?
Si
quiere saberlo, no olvide buscarlo en la otra edición de la revista.
Epílogo
Podría
escribir una reflexión completa, pero se perdería la oportunidad de pensar en
lo escrito, además de ser un tema con muchos elementos involucrados, si tiene
algún comentario, estaré gustoso de escucharlo. Me puede escribir a gap.pensante@gmail.com
GAP
El caminante de la noche.
Autor:
Wilmer Guillermo Acosta Pinzón. Paipa,
Colombia. Comunicación Social, Universidad Nacional Abierta y a Distancia