EL REFLEJO INTERNO DE LA LUZ.

 

A veces nos preguntamos de modo ardiente…

¿De dónde proviene la felicidad anhelada?

Buscamos con esmero e impacientes,

en elementos materiales que dan nada.

 

La humanidad sigue caminos inciertos, ¡tan equivocada!

Usando medios nuevos e increíbles sin merma,

embelesada y más aún maravillada,

buscando verdes brotes en tierras yermas.

 

Continúa ignorando que afuera sigue el oscuro,

sorteando las inequidades y confusiones en bruma.

Triste realidad humana, de necedad taciturna,

de desconocimientos sobre su interior en veladura.

 

Si tan solo buscaran en lo profundo del alma,

las respuestas claras y luminosas,

brotarían a modo de manantiales de agua calma,

como revelaciones de noticias jubilosas.

 

Se trata solo de obtener conciencia,

Y para esto ciencia ninguna se debe poseer,

De la Luz Divina que existe y se acrecienta,

Cuando los humanos comprenden que gran fe hay que sostener.

 

¡Ay almas dormidas de los nativos de la tierra!

¡Ay de aquellos que no lo saben todavía!

¡Ay de los que buscan fuera y por eso yerran,

sin saber que el brillo máximo,

 del profundo interior brotaría!

 

En guerras inverosímiles… crueles, perversas y sin sentido,

se trenzan odios, envidias y ambiciones.

En funestos caminos el humano equivoca torcido,

Perdiendo el rumbo que lo conduce a su buen destino.

 

El planeta necesita ordenar sus misterios,

Y los humanos deberían marchar en equilibrado sentido.

Ser nobles y justos podría compensar,

penetrando en arcanos profundos,

 descubriendo la verdad de a quién adorar.

 

Para iluminar a todos en plena algarabía,

el Universo se espeja en cada mortal quien todavía,

perdido, tímido y angustiado,

 tembloroso la paz busca,

en un mundo futuro que peligra,

 donde deberá aprender y descubrir por fin… la maravilla.

©-2015-Renée Escape-

 

Autora: Dra. Renée Adriana Escape. Mendoza, Argentina

rene.escape@gmail.com

 

 

 

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