La
técnica al servicio de una patria mejor.
La técnica al servicio de una patria mejor, esta frase
propuesta por el estudiante Jesús Robles Martínez en el primer Congreso
Nacional de Estudiantes Técnicos, en la ciudad de Chihuahua en 1937, consolida
el espíritu con el que se creó y sigue representando a una de las más grandes
casas de estudio en México, el Instituto Politécnico Nacional (IPN).
A pesar de su modificación años más tarde, la esencia de
este lema ha representado para los miles de alumnos que han pasado por sus
aulas –tanto a nivel de educación media superior, universidad y posgrado- el
ideal de una educación que se debe a la sociedad a la que pertenece y en
términos más amplios a la relación bidireccional entre la sociedad y el sistema
educativo, por lo que las intervenciones recientes del gobierno federal -a
partir de las acciones de la ahora ex-directora general Yoloxochitl Bustamante-
no pueden entenderse sino como una afrenta a la larga tradición del Politécnico
y a su espíritu de servicio a la patria.
El IPN -pilar en la construcción del sistema de educación
superior en México- en este año se vio envuelto en una de las mayores reformas
internas que ha tenido en sus 78 años de existencia. En el mes de septiembre se
supo de la propuesta para reorientar los planes y programas de estudio así como
el reglamento interno del Instituto, lo que comenzó a generar inquietud por
parte de la comunidad politécnica, ya que se mencionaba que estas modificaciones
estaban en sentido opuesto a las necesidades al interior del IPN y de su
relación con la sociedad.
Disfrazada de una consulta amplia e informada y de la
participación democrática de la comunidad del IPN, la propuesta de
reorientación planteaba el cambio de planes de estudio a modalidades educativas
(flexibles y maleables), así mismo, se omitían las funciones sustantivas de
investigación científica, extensión y divulgación del conocimiento, así como la
consolidación de las “salidas laterales” que desvalorizarían el trabajo de los
estudiantes ya que dejarían de ser ingenieros y pasarían a ser técnicos
superiores.
Ante esta condición, los estudiantes y la comunidad
politécnica pasó de revisar y analizar la Ley de la gravedad de Newton a la Ley
Orgánica del Instituto, en un propósito por evitar la aplicación de estas
reformas internas y más aún, por ser fieles al lema -y al espíritu de
retribución social- que los ha representado por más de tres cuartos de siglo.
Así, durante septiembre y octubre las manifestaciones y
muestras de desaprobación a la gestión de la directora Yoloxochitl se hicieron
presentes, tanto en las calles como en las redes virtuales, tomando fuerza y
consolidándose como un grupo organizado, con una idea clara de los objetivos que
perseguía y de los medios que tenía a su mano para ejercer presión y obtener
los propósitos por lo que se conformaron.
A partir de la muestra evidente de oposición a la directora
y su propuesta de reorientación del IPN, se logró el diálogo con el secretario
de gobernación, quien -en una ventana de oportunidad política- atendió a los
demandantes, pero al observar que estos consideraban que sus respuestas eran
incompletas e imprecisas, optó por retirarse de una posible bomba política y
pasar la encomienda al secretario de educación. Ya en manos de Emilio Chuayffet
-quien no lo pensó dos veces- procedió a pasar el tema al subsecretario de
educación superior, el Dr. Fernando Serrano.
Ya estando un campo menos político-electoral y más en uno
político-sustantivo las demandas de la comunidad politécnica se establecieron
en mesas de diálogo, donde no sólo se contemplaron las propuestas iniciales,
sino también se manejó la idea que ha aparecido en distintas mesas de debate
del propio instituto, la autonomía politécnica.
El proceso de negociación –con duración de dos meses-
representó una disputa, donde por un lado se buscó la reivindicación de los
ideales del instituto y por el otro, se planteó la propuesta política del
estado orientada en abrir el instituto a los intereses del sector productivo
empresarial y no de la sociedad a la que pertenece.
Ante este dilema, los jóvenes de la comunidad politécnica
levantaron la voz, pasando de las solicitudes a las exigencias a sabiendas que
la moneda de cambio en esas mesas era la congruencia, la argumentación
fundamentada y la visión prospectiva.
Así, el dialogo entre ambos lados permitió responder a las
demandas de la comunidad y a establecer mejores blindajes para evitar la
manipulación y el albazo académico que pretendía realizar la ex-directora
Bustamante.
En el siguiente cuadro se presentan las exigencias que se
manifestaron al inicio de las mesas de diálogo y lo que se logró concretar en
las mismas.
Pliego
petitorio de IPN a Secretaría de Gobernación 30
de septiembre de 2014 |
Firma
de acuerdos del Gobierno Federal y la Asamblea General Politécnica (AGP)[1]
5
de diciembre de 2014 |
Cancelación
total del Reglamento Interno propuesto y aprobado por la directora
Yoloxochitl Bustamante. |
Como
parte del establecimiento de las mesas de diálogo se exigió la previa
cancelación de los planes de estudio, para comenzar en la construcción de una
nueva propuesta. |
Cancelación
de los planes de estudio propuestos por la misma directora. |
Como
parte del establecimiento de las mesas de diálogo se exigió la previa
cancelación de los planes de estudio, para comenzar en la construcción de una
nueva propuesta. |
Destitución
de la Dra. Yoloxochitl Bustamante como directora del IPN. |
Dentro
del proceso de negociación se logró la destitución de la Dra. Yoloxochitl
Bustamante y en su lugar se estableció al Dr. Enrique Fernández como director
(anteriormente fungía como director de la ANUIES). |
Salida
de los elementos de la policía bancaria y de valores de las instalaciones del
instituto. |
La
función de vigilancia deberá recaer en un órgano interno dependiente del
sector administrativo del IPN con la única facultad de salvaguardar la
integridad y salvaguardar la seguridad de la comunidad politécnica y del
patrimonio institucional |
Cese
de pensiones vitalicias a los ex directores del IPN. |
Cancelación
del oficio SSFP/408/1951 referente a las remuneraciones de los ex Directores
Generales y que el recurso sea empleado de manera trasparente conforme a las
necesidades de la comunidad politécnica. |
Democratización
del IPN, comenzando por la consolidación de un proceso de representación
equitativa de estudiantes, docentes y trabajadores de apoyo. |
Reconocimiento
del carácter resolutivo y refundacional del Congreso Nacional Politécnico
(CNP). |
Garantizar
la seguridad (académica, administrativa y legal) de los miembros de la
comunidad politécnica. |
Creación
de la Defensoría de los Derechos Individuales y Colectivos con autonomía de
funciones para garantizar la seguridad e integridad (académica,
administrativa y legal) de los miembros de la comunidad politécnica. |
Aumento
presupuestal tanto al IPN como a los sectores educativos públicos y de
investigación científica y tecnológica con un monto mínimo equivalente al 2%
del PIB. |
Inclusión
por parte del titular del Ejecutivo Federal una iniciativa dentro del
presupuesto de Egresos de la Federación un incremento sustancial en el gasto
de la educación pública, así como en el ramo de la ciencia, tecnología e
investigación con relación al ejercicio fiscal 2014. |
Dar
a conocer todas las injerencias del sector privado en el IPN referente a los
planes, proyectos y programas de estudio e investigación. |
Garantizar
por parte del titular del Ejecutivo Federal la desvinculación de las
unidades, centros y escuelas del IPN a injerencias del Tecnológico Nacional
de México en aspectos que contravengan los principios fundacionales del
Instituto. |
Erradicar
los grupos porriles del IPN. |
Compromiso
del Gobierno Federal para investigar, denunciar y dar seguimiento de actores
intelectuales y materiales que violenten y atenten la integridad de la
comunidad politécnica, la imagen e infraestructura del Instituto. |
|
Desincorporación
de las unidades del nivel de educación media superior del Sistema Nacional de
Bachillerato y de la Reforma Integral de la Educación Media Superior. |
Lo resultados de este proceso de consenso y construcción que
se dio al interior de la comunidad politécnica para dialogar con el gobierno
federal, se logró observar el espíritu y actitud de una nueva juventud que se
manifiesta, levanta la voz y se organiza, ya sea como parte de procesos
electorales, en la imposición de reformas estructurales o en la exigencia de
estudiantes desaparecidos (como parte de un hartazgo mayor a las formas con las
que maneja el país).
Así, el proceso que
se vio en los últimos meses del año con la comunidad politécnica es una muestra
de su congruencia con el lema que aquel estudiante proponía en el congreso de
Estudiantes Técnicos en los años 30: “La técnica al servicio de una patria
mejor”.
Autor: Daniel Cuellar Martínez. Atizapán de Zaragoza, estado de México.
México.
[1] Los acuerdos que se presentan fueron suscritos ante notario público y resultado de los diálogos que se iniciaron el 4 de noviembre de 2014 en Zacatenco, D.F. Esto acuerdos fueron publicados dentro del Diario Oficial de la Federación el 09/12/2014