Cozumel, lugar paradisíaco.

 

Cozumel es una isla en el caribe mexicano, su nombre significa isla de las golondrinas, de acuerdo con las leyendas Mayas, Cozumel fue la casa de la diosa Ixchel del amor y la fertilidad. Numerosos templos religiosos fueron dedicados a la diosa Ixchel y en respuesta la diosa les mandó a los Mayas a sus pájaros favoritos como símbolo de gratitud. Por esa razón los mayas bautizaron a Cozumel como la isla de las Golondrinas.

Es la tercera isla más grande de México, con una superficie de 647.33 km2, La isla mide alrededor de 48 Km. de norte a sur y 16 Km. de este a oeste, está situada al sureste del país, en el Mar Caribe, aproximadamente a 50 Km. de Cancún, y a 20 km al este de la península de Yucatán,  es uno de los nueve municipios del Estado de Quintana Roo.

Antes de la llegada de los conquistadores españoles la isla era parte de la provincia de Ecab y era sede de un santuario dedicado a Ixchel, la diosa maya de la fertilidad. El lugar era el destino de un largo peregrinaje emprendido por las parejas del imperio para pedir un hijo y al cual acudían los agricultores para pedir una buena cosecha.

En 1511 un barco español naufragó cerca de la isla y dos de sus tripulantes lograron llegar hasta Cozumel. Jerónimo de Aguilar y Gonzalo Guerrero vivieron dos años con los residentes hasta que una expedición dirigida por Juan de Grijalva llegó a la isla para llevarse a de Aguilar, quien a la larga fungiría como traductor de Hernán Cortés y la Malinche.

Por su parte, Gonzalo Guerrero se casó con una hija del cacique de Chactemal y formó la primera familia mestiza de la región. Guerrero terminó uniéndose a los mayas en su defensa contra los conquistadores.

 

Ubicada en el Caribe mexicano, Cozumel es una isla llana formada de roca volcánica porosa. La elevación natural más importante en la isla está a menos de 100 MSN. Los cenotes formados por la filtración de agua a través de la piedra caliza durante miles de años, son un espectáculo maravilloso, pudiéndose apreciar distintas especies marinas.

Cozumel es hogar de uno de los arrecifes más grandes de todo el mundo: El arrecife de Palancar.

Todos los arrecifes que se encuentran rodeando la isla, han sido declarados Parques Nacionales.

Además del arrecife de Palancar, está el arrecife Columbia a tres kilómetros de este, aquí podemos ver tortugas y mantarrayas flotando esporádicamente.

Una visita obligada es a Punta Sur, para observar la boca de una laguna al Mar Caribe, subir al bote, ser testigos de como un grupo de personas amantes de su hábitat han reforestado los manglares que fueron arrasados por los ciclones Gilperto y Wilma y volver las cosas casi a como se encontraban originalmente, de como la buena voluntad, pero la desinformación de dos personas europeas que sembraron 2 abetos no ayudaron al ecosistema, ya que dichos árboles crecen muy grandes , absorben mucha agua y no permiten que nada más crezca a su alrededor.

Tanto la flora como la fauna en ese lugar son impresionantes y de gran variedad, dentro de la segunda el trinar de las diferentes aves es un arrullo único que rompe un silencio asombroso, silencio que también se rompe con el silbato del conductor del bote para llamar al güero, un cocodrilo de unos 6 metros de largo que circunda nuestra embarcación, que ha detenido su marcha y se mete por debajo de ella y vuelve a salir posando para las fotografías, el bote continúa navegando lentamente y unos minutos más tarde el silbato vuelve a sonar para llamar a Pancho y María, una pareja de cocodrilos que siempre andan juntos, más adelante dos flamingos arriban, provenientes de África, , el guía nos dice que originalmente son de color café claro, pero al llegar a anidar en la isla se nutren de unas algas rojas lo que les da su color rosa característico cuando emigran por el que se identifican, hay gaviotas, iguanas, pelícanos y muchas otras especies.

El segundo paso es la visita al Faro Punta Celaray, subir sus aproximadamente 300 escalones de la escalera de caracol, y salir al mirador a través de una puerta de aproximadamente 50 centímetros casi en cuclillas, ciertamente vale la pena, el majestoso Mar Caribe se yergue en toda su inmensidad, sus diferentes colores en tonos de azul y verde, el sonido de las olas metros abajo y un reconfortante viento marino golpeando la cara son percepciones inigualables.

El tercer punto de nuestro recorrido es a un mirador para observar majestuosos acantilados de formas variadas y escuchar el impresionante romper de las olas en ellos, y ver los distintos tonos en los colores del mar.

El cuarto punto es una visita a unas ruinas mayas en medio de la vegetación, disfrutando de las sombras de los árboles, ya que el sol es abrazador, un silencio impresionante, una soledad sobrecogedora, iguanas cruzando en la vereda, un enjambre de avispas que nos hizo retroceder a toda prisa, y el diálogo de dos animales al nivel del piso, que no se veían, emitiendo un sonido que nunca había escuchado, bromeando dije que eran los espíritus de los mayas.

El quinto punto es el centro de Cozumel, su muelle con un crucero atracado, los viajeros descendiendo y apresurándose a visitar los comercios para comprar recuerdos del lugar.

Todo lo anterior hace de Cozumel un paraíso en el Caribe Mexicano.

 

Autor: Dr. Bulmaro Landa Quezada. Tlalnepantla, Estado de México, México.

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