La mayoría de personas ciegas, emplean bastón y se estima
que solo un 5% se decantan por un perro guía.
En este artículo, deseo contarles algunas razones que pueden
ser la respuesta a estas cifras.
En primer lugar, ningún usuario de perro guía puede serlo
sin antes no haberse desplazado con un bastón pues la orientación y la
movilidad previa, son elementos indispensables para optar por un perro
lazarillo.
En términos sencillos, el perro debe caminar en línea recta
de esquina a esquina y luego esperar órdenes.
Si el usuario no sabe hacia donde quiere dirigirse, ambos se
perderán aunque las personas que los vean, achaquen la desubicación al can.
Pretender que un perro por más entrenado que esté, sepa hacia
donde quiere que lo acompañe, vea el semáforo y además, tenga los conocimientos
humanos para determinar la función de los colores rojo, amarillo y verde, es
ilusorio.
Claro que ellos están entrenados para no cumplir una orden
si esta pone en peligro su integridad y la de su amo por ejemplo si le decimos
que avance cuando viene un auto cerca (desobediencia inteligente) o llegar a
nuestro trabajo, hogar, o iglesia, si hacemos el recorrido con frecuencia pero
esto es por costumbre no por un sexto sentido canino.
Ante la pregunta ¿bastón o perro? La respuesta es individual
y antes de decidir, hay que valorar muchos aspectos.
¿Le gustan los perros? Si la respuesta es negativa, sin duda
el bastón es su única elección pues a este puede dejarlo en casa si va acompañado,
de regreso no hay problema en abandonarlo tras la puerta hasta que lo ocupe de
nuevo, él no se va a resentir, requerir que lo peine, sepille, alimente, lave
los dientes,lo saque a hacer sus necesidades fisiológicas, darle agua, llevarlo
al veterinario, bañarlo, comprarle toallas perfumadas, vacunas contra la rabia,
garrapatas, desparacitantes, además, armarse de paciencia cuando en un
restaurante, bus o taxi entre otros no le permitan ingresar con su perro guía.
¿Quiere un amigo fiel 24 horas que además, se mantenga a su
lado y le brinde seguridad cuando se desplace por calles y aceras poco
transitables? es usted un candidato a ser un buen usuario de perro guía.
Con el bastón, para saber que hay un obstáculo o un hueco,
debe detectarlo antes, si no lo hace se golpeará o irá dentro del oyo.
Con el perro guía, la mayoría de las veces ni se enterará de
estas situaciones.
El perro se encargará de alejarlo del peligro.
En mis varias décadas como usuario de bastón, nunca escuché
un halago a esta herramienta pero durante los 20 meces que tengo de andar con
mi Labradora bella, todos los días escucho expresiones de admiración por su
belleza, inteligencia, fidelidad y abnegación lo que constituye un aspecto
socializador.
Con alguna frecuencia escucho lamentables noticias de
personas ciegas que cayeron en una alcantarilla sin tapa, se golpearon en
portones, rótulos comerciales, autos aparcados en las aceras y otros accidentes
que hasta hoy, no he escuchado que le pase a los usuarios de perros guías pero
en honor a la verdad, el descuido o mal manejo aumenta los riesgos.
Quienes prefieren el bastón, dicen que si se les quiebra,
dobla o se ponen feos, solo los tiran y
adquieren otro.
Con los perros, hay que hacer una solicitud, esperar a que
la escuela Leader Dog for the blinds (proveedora para Costa Rica y muchos
países en el mundo) la apruebe, permanecer cerca de un mes en estados Unidos
entrenándose con el lazarillo asignado y luego confiar en que logren acoplarse
como el binomio que formarán por cerca de 9 años de trabajo conjunto y darle la
mejor calidad de vida en su jubilación.
NO importa si usted es usuario de bastón o perro guía, lo
verdaderamente necesario, es que sea responsable, les de un buen uso, los
mantengan óptimo estado y esté conforme con la decisión que tome sin criticar a
quienes prefieren emplear apoyos diferentes a los de su predilección.
Autor: Roberto Sancho Álvarez. San José, Costa
Rica.