Vértigo.
(D’entre
les Morts”, EEUU-1958.)
Ficha
Técnica:
Director:
Alfred Hitchcock
Guión: Alec
Coppel & Samuel Taylor
Reparto: James Stewart, Kim Novak, Henry Jones, Barbara Bel Geddes
Música:
Bernard Herrmann
Fotografía:
Robert Burks
Sinopsis:
Scottie
Fergusson (James Stewart) es un detective retirado de la policía de San
Francisco que padece de vértigo. Gavin, un viejo amigo del colegio, lo contrata
para vigilar a su esposa Madeleine (Kim Novak), bella mujer obsesionada con su
pasado. Scottie se va involucrando con la mujer -¿o con el doble de ella?- de
manera obsesiva. Tal situación lo llevara a enfrentarse con sus fantasmas.
Comentario:
Durante
los años cincuenta Hitchcock realizó algunas de sus películas más célebres:
“Extraños en un tren” (1951), sobre una novela de Patricia Highsmith y con
guión de Raymond Chandler, donde se lleva a cabo un pacto siniestro para
intercambiar dos asesinatos y que los crímenes resulten impunes; “Yo confieso”
(1952), que describe el drama de conciencia del padre Michel Logan,
espléndidamente interpretado por Montgomery Clift; “La ventana indiscreta” (1954),
impagable reflexión sobre el lugar del espectador cinematográfico; “Atrapar a
un ladrón” (1955), último filme con su actriz preferida, Grace Kelly, que
después de interpretar a Frances Stevens conduciendo endiabladamente por unas
sinuosas carreteras de la Costa Azul, lo abandonó para casarse con el príncipe
de Mónaco y más tarde encontrar la muerte en un accidente de tráfico en ese
mismo lugar; Le siguió “¿Quién mató a Harry?” (1956), extrañísima comedia donde
se dio a conocer Shirley MacLaine, película que resulta desconcertante por
absurdamente lógica; Dos cintas: “Vértigo” y “Con la muerte en los talones”,
son historias que mantienen una inusual frescura pasados los años y que siguen
avalándolo como el mago indiscutido del suspense.
Obra
maestra del genial Hitchcock, la cinta que veremos este Martes de cine es quizá
su película más aclamada por la crítica, pues siempre aparece en las listas de
los críticos sobre las mejores películas de la historia del cine.
Sin
duda, “Vértigo, de entre los muertos” –como se le conoció en su estreno en
México-, es la suma de su talante poético y estético, la celebración de su
aplastante sensibilidad erótico-satánica es, donde sus obsesiones plásticas
alcanzan una de las cotas más abstractas y líricas de su carrera. Un verdadero
punto y aparte en la visión que el cine ha dado del amor fou, un desolador
poema surrealista sobre la vida y la muerte, con James Stewart y Kim Novak
fundidos en una hipnótica coreografía pasional sin parangón en la historia del
cine.
Hitchcock
hace una brillante adaptación de una novela de Pierre Boileau y Thomas
Narcejac, la película aun permanece como una de sus cimas, amén de ser una de
las más personales visiones de la humanidad que nos ha dejado un creador tan
personal como él, cuya fuerza principal reside en su capacidad para fascinar,
emocionar o hipnotizar al espectador. Que, además, se basa más en obsesiones
que en sensaciones En la obsesión está la clave. Es como una enfermedad de la
que podemos contagiarnos, una experiencia brutal.
Autor: Rafael
Fernández Pineda. Cancún, Quintana Roo. México.