Motivo Discursivo
Quiero Salvar mi Costa Rica.
De pequeño me
preguntaba el ¿porqué cada 15 de Septiembre, tenía que levantarme temprano?
Todos me decían, para ver los desfiles y así viví mis primeros años. Luego fui a
la escuela y estudié mucho, conocí la historia de mi país y la realidad de mis
días, comprendí que tenemos ambiente, un techo que comer y una naturaleza para
sobrevivir, con tristeza pensé en quienes no tienen y en lo desagradecidos que
somos al tirar lo que con tanto amor, la naturaleza nos ha prestado.
¡Me gusta el sol de
cada mañana, el verdor de los campos y el canto de las aves? Pero la humanidad
toma estos tesoros como si no se fueran a acabar, se piensa que la naturaleza
tiene infinitos reemplazos pero comprobé que el suelo está cansado, nuestros
árboles están lastimados y nuestra fauna se está perdiendo. El hombre día con
día asecha nuestro entorno con sus grandes maquinarias, quieren construir
grandes empresas, edificios enormes y ciudades convulsionadas.
Se piensa en el
progreso económico y la competencia internacional y no se piensa en lo nuestro,
dice mi abuelo que conoció una linda Costa Rica, una verdadera Suiza centro
americana, y sus ojos se humedecen al ver cómo la hemos destruido, me gustaría
crecer y decirle a mis nietos que nosotros salvamos a nuestra Costa Rica, que
tomamos el ejemplo de nuestros antepasados y si ellos supieron defender sus
raíces, porqué nosotros no podemos ser autóctonos. Me asusta contemplar cómo va
muriendo nuestra cultura, queremos vivir de lo extranjero y lucir patrones que
no nos corresponden, en la escuela y en mi casa me dijeron que este es un país
de democracia ¿Porqué miro que nos imponen un modelo de gobierno y decisiones
que nos afectan?
Consulté en mis libros
de texto y descubrí que eso se llama capitalismo, que en otros países lo
utilizan los gobernantes para imponer y que se valen de mal llamadas
democracias en donde el rico crece y el pobre cae. Mi corazón tiembla al pensar
que mi nación corra este peligro, escucho hablar de la guaria morada y el árbol
de guanacaste pero ya quedan muy pocos en nuestros valles por tanto pedí que se
detenga la tala desmedida y la caza de animales, para que la especie no se
extinga.
Quiero llegar a grande
escuchando el canto del lligüirro en mi ventana, contemplando la majestuosa
sombra de los árboles que nos cobijan y mojándome en las cristalinas aguas de
nuestros ríos no contaminados. Quiero decir con éstas líneas que debemos
trabajar unidos, tanto chicos como grandes, tanto hombres como mujeres, el país
nos corresponde y es nuestro deber agradecer a la madre naturaleza el
privilegio enorme de nuestros recursos que nos dio para el trabajo y sustento
nuestro y que mejor agradecimiento que conservarlos y preservar nuestra especie.
Nuestros hermanos nos
llaman “Ticos”, por eso quiero sacar el tico que llevo dentro, gritar al mundo
lo que poseo, compartir con todos mi gran tesoro, por tanto prometo defender lo
que tanto amo y elevar al cielo la autonomía y bendición de vivir en Costa Rica
y no cumplir únicamente con un desfile o colocar una bandera si no hacer
conciencia, sobre mi papel de ciudadano, mi deber de estudiante y de hijo de la
patria que me vio nacer, por tanto poder realmente decir, que somos una nación
independiente.
Autor: Esteban Segura
Peñaranda. Heredia, Costa Rica.
Profesor de Filosofía.