ASÍ
JUSTIFICAMOS EL TERROR.
Uno se bebe el cielo cuando atardecen las
ciudades, se desliga del mito y tensa otra figuración de la anarquía, que nos
fragmenta al delinear la identidad en Juan o Pablo, el norte o el oeste. ¿Qué pensarán
los otros cadáveres del mío?, si vamos camino a una densa estocada al trasegar
los imperios que nos signa el espíritu, el peso de sus bajas profecías. Así
justificamos el terror de trascender la oscuridad vivida, en bodas que traducen
en cada lid algún significado: son muy breves las semanas del hombre.
Autor: Agustín Labrada Aguilera. Chetumal, Quintana
Roo. México.